Investigadores de Huelva cartografían por primera vez las escombreras de 12 yacimientos mineros localizando millones de toneladas de residuos con valor comercial

Investigadores de las universidades de Huelva y Cádiz han cartografiado, por primera vez, el volumen y la composición de las escombreras de la Faja Pirítica, una de las mayores regiones metalíferas del mundo. El estudio, publicado en la revista académica Waste Management Bulletin, revela que estos residuos alcanzan los 17,7 millones de metros cúbicos, equivalentes a más de 23 millones de toneladas, y contienen metales como hierro, zinc, plomo y tierras raras, sin riesgos radiológicos significativos y con un alto potencial comercial.

El inventario abarca 44 escombreras de 12 explotaciones mineras distribuidas a lo largo de 37 kilómetros en la cuenca minera y Portugal. Para ello, se han analizado las minas de Tharsis, Lagunazo, Cueva de la Mora, San Telmo, Zarza-Perrunal, Riotinto, Sotiel Coronada, Cabezas del Pasto, Nuestra Señora del Carmen, Saos Domingos (Portugal), Herrerías, Cobre las Cruces (Sevilla).

Felipe González, profesor de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Huelva y uno de los autores del estudio, explica a Huelva Información que este trabajo es fruto de la colaboración entre dos grupos de investigación de la Onubense: "Fryma (Física de Radiaciones y Medio Ambiente) y Tharsis (dedicado a estudiar Mineralogía y Geología de yacimientos minerales, Mineralogía y Geoquimica Ambiental, así como Geoquimica de rocas ígneas, metamórficas y sedimentarias)".

Hasta la fecha, dice, hay libros y registros antiguos de las escombreras que existían en distintos yacimientos de la Faja Pirítica, pero se contaba tan solo con una especie de inventario. "No había nada volumétricamente serio desarrollado al respecto". Por ello, lo que se ha hecho es, por una parte, "la cubicación de escrombreras con drones de hasta 12 yacimientos de los más importantes y, por otra parte, se ha realizado un análisis químico del contenido de esas escombreras. A partir de ahí se han calculado volúmenes y se ha estimado una cantidad de elementos que hay en cada una de ellas", revela.

Se trata, no solo de un inventario en el que se recoge el número, sino que aporta un porcentaje de elementos que pueden ser útiles para futuras empresas a las que les pueda interesar extraerlo.

Durante más de un siglo, estas zonas fueron explotadas por empresas que extrajeron principalmente cobre, hierro, zinc y plomo, dejando tras de sí enormes montañas de residuos con alto contenido metálico. Sin embargo, "lo que antes era material desechable, ahora, con el refinamiento de toda la tecnología, puede ser útil. Nosotros proponemos algunas medidas de uso, aunque evidentemente la empresa que venga verá si le puede interesar y tendrá que analizar si lo puede extraer o no, pero ya conoce el dato de la cantidad que contiene", explica González.

Así, según el profesor de Ciencias de la Tierra, con esta investigación se reafirma que "Huelva no solo es una de las grandes potencias a nivel mundial de sulfuros masivos, sino que incluso los escombros que se han generado durante los últimos 150 años pueden tener interés económico para las empresas. No solo es un residuo, sino que se puede transformar en un producto".

Composición de las escombreras y metales estratégicos

Tal y como se recoge en la Plataforma Andalucía Investiga, mediante técnicas de fotogrametría con drones, los científicos lograron estimar tanto la masa como el volumen de los desechos en las principales minas históricas.

En Sotiel Coronada, el depósito de piritas tostadas contiene 1,84 millones de toneladas de hierro, mientras que en Tharsis los acopios suman 2,1 millones de toneladas de hierro y 0,25 millones de toneladas de azufre.

En Riotinto se encuentran acumulaciones con 1,6 millones de toneladas de hierro y 0,12 millones de toneladas de zinc, y el yacimiento de San Telmo concentra aproximadamente el 40% de las casi 1.000 toneladas de tierras raras detectadas, entre ellas neodimio, cerio, lantano y samario.

En conjunto, las 44 escombreras contienen 3,5 millones de toneladas de hierro, 2,86 millones de toneladas de azufre, 1,96 millones de toneladas de silicio, 0,12 millones de toneladas de zinc, 0,09 millones de toneladas de plomo, 0,05 millones de toneladas de cobre y cerca de 1.000 toneladas de tierras raras.

Estos metales son estratégicos. El hierro y el zinc pueden aprovecharse en pigmentos y cementos; el plomo y el cobre tienen aplicaciones industriales, y las tierras raras se utilizan en imanes de aerogeneradores, baterías y LEDs.