"Este es un gran barco en el que cabemos todos"

Le bautizaron y le apuntaron a la hermandad, es de familia cofrade, después de haber sido costalero ahora es el capataz general.

-¿Cuándo llega a la cuadrilla de costaleros?

-Tenía unos 15 años, en la Virgen del Rosario, salí en octubre, pero como seguía creciendo me salí de altura y tuve que dejarlo.

-¿Y qué hizo?

-Antonio Quintero me dijo que me fuera con él a empujar en el paso del Cristo, cuando todavía iba con rueda. Fueron los dos últimos años.

-¿Aquello cómo funcionaba?

-Podíamos manejar unos tres mil kilos con sólo siete personas, llevaba una rueda delantera y otra trasera, ambas con volante, más otra rueda en los dos costaleros, con un sistema hidráulico para simular movimiento, tenía freno.

-¿Cómo fue esa experiencia?

-Muy positiva, nadie se puede imaginar cómo era aquello, acabábamos reventado.

-¿Cuándo llegan los hermanos costaleros a este paso?

-En 1980 montamos la cuadrilla, la cree yo con gente del instituto Alonso Sánchez y de los Maristas, fue la base de la cuadrilla para ese primer año con Juan Manuel Gil y Tony González, luego vinieron Enrique Pásaro y Cuesta.

-¿Aquí iría en primera?

-Bueno, sólo el primer año, después pasé a segunda, aunque volví a primera con un taco para llevar la pata.

-¿En qué momento se hace cargo de la cuadrilla de costaleros?

-En 1995 me nombraron capataz tras la Semana Santa y saco el paso del Corpus Christi y hasta hoy. En 1996 es cuando llevo por primera vez el paso de la Cena.

-¿Y de capataz general?

-Desde 1999 la hermandad me pide que me haga cargo de los dos pasos.

-¿El trabajo cómo se desarrolla?

-La verdad es que no me puedo quejar, hemos conseguido que en los dos pasos tengamos dos cuadrillas.

-¿A qué se debe eso?

-Fundamentalmente al buen equipo que tengo, con Pepe Ivar, que viene conmigo en el Cristo y en el palio con Fernando Mergal y Juan José Barroco.

-¿Cómo lleva un capataz el estar al frente de dos pasos?

-Ensayamos juntos e intento que vayamos cerca, el primer ensayo siempre lo hago con el palio y el último con el Cristo, con el que voy el Domingo de Ramos.

-Este es un barco en el que caben todos.

-Sí, en la Sagrada Cena cabemos todos, aunque bajo el paso este año para tres huecos se han presentado 40 personas, lleva dos cuadrillas de 66 personas.

-¿Es que aquí hasta los apóstoles se ponen de pie para aplaudiros?

-(Sonríe). La verdad es que estamos contento con el trabajo. Hemos tenido siempre un estilo sobrio, con un costero elegante, este año incorporaremos algo pero no muy extremo, porque ante era muy estático con todos los apóstoles sentados, ahora ha cambiado con algunos de pie.