Extraño avistamiento OVNI en los chalets de Aracena

Lo que parecía una tranquila noche veraniega en una exclusiva zona de chalets residenciales a las afueras de la localidad onubense de Aracena se transformó, para tres señoras de la alta sociedad sevillana, en una experiencia que es digna de un episodio de ciencia ficción.

Corría el 6 de julio de 1969, los hechos ocurrieron alrededor de las 22:30, cuando en cada uno de los tres chalets -que estaban situados a unos 60 metros de distancia entre sí- sus propietarias se encontraban haciendo diferentes cosas, una de ellas viendo la televisión en compañía de sus hijas.

De forma repentina, el servicio eléctrico se interrumpió, dejando a oscuras no solo sus viviendas, sino aparentemente a toda la localidad. Desde la compañía eléctrica se informó que se trataba de una avería, sin mayores explicaciones.

Sin embargo, lo que siguió desafía toda lógica. Apenas diez minutos después, cuando regresó la luz, una de las señoras pidió auxilio desde su chalet a fin de que fueran a recogerla a ella y a sus hijas.

Las otras dos vecinas subieron rápidamente a un coche y, antes de arrancar, observaron en el cielo un objeto luminoso que descendía lentamente. Describieron el artefacto como una especie de “taza de convento invertida”, de unos 80 centímetros de diámetro, blanco con bordes violáceos, suspendido en el aire sin emitir ningún sonido.

Al llegar al chalet, una de las mujeres entró para saber qué ocurría. La propietaria explicó que, al irse la luz, se dirigió al dormitorio de sus hijas con una especie de fósforo encendido y, al pasar por el hueco de la escalera, sintió un estremecimiento tan intenso que quedó paralizada por el miedo. Aseguró que la impresión que sintió no era “de este mundo”, y que no se atrevía a pasar la noche sola.

Mientras tanto, la señora que había quedado en el coche tocaba el claxon del mismo insistentemente, declarando más tarde que sentía como si presencias invisibles la observaran.

Ya reunidas las tres señoras, decidieron regresar a uno de los chalets con un telescopio para intentar observar mejor el objeto, que seguía visible en el cielo. Subieron a una pequeña azotea, pero el objeto principal había desaparecido.

No obstante, segundos después, divisaron un potente haz de luz —descrito como un "fufaiter", es decir: un foofighter o esfera de luz— que se desplazaba en diagonal sobre la carretera. El objeto se detuvo frente al chalet durante 20 minutos.

A través del telescopio, una de las señoras observó cómo el artefacto proyectaba un rayo de luz azul, de unos 30 cm de longitud y tan fino como un lápiz, que se dirigía lentamente hacia ellas.

El rayo deslumbró a la observadora y posteriormente iluminó a las tres mujeres. Al cruzar su trayectoria, incluso hizo visible una mariposa nocturna blanca, lo que aumentó la inquietud de las testigos.

Presa del pánico, el grupo se refugió dentro de la vivienda, cerrando la puerta de la azotea. Desde una ventana continuaron observando el fenómeno.

Una de las señoras incluso intentó comunicarse con la luz, encendiendo y apagando las lámparas, sin obtener respuesta aparente. El objeto desapareció de la vista, pero minutos después volvió a aparecer en forma de un rectángulo rojizo parpadeante que parecía emanar desde los árboles de la carretera.

El fenómeno estuvo visible hasta alrededor de las 03:30 de la madrugada. En ese momento, las mujeres decidieron juntar sus camas en una habitación para no pasar la noche solas.

Mientras algunas lograron conciliar el sueño, otras —incluyendo una joven empleada— permanecieron despiertas hasta las 5:00, fue en ese mismo momento en el que avistaron lo que describieron como una gran cúpula en la distancia, con luces intermitentes formando un anillo en su base. La dirección apuntaba hacia un pueblo cercano de la sierra onubense.

Un detalle que no pasó desapercibido fue el comportamiento inusual de los animales ya que durante todo el suceso, los perros del campo aullaban sin cesar, sin llegar a ladrar.

A la mañana siguiente, los esposos de las señoras intentaron replicar las luces de la noche anterior encendiendo y apagando luminarias. Pero, según los testimonios, lo visto durante la madrugada no tenía nade de comparación con ninguna fuente de luz convencional.

El suceso fue recogido por el Grupo Sur del Equipo Nacional de Investigadores, que abrió una línea de investigación sobre lo que consideran uno de los incidentes más desconcertantes de los informados en los últimos años en el sur de España –teniendo en cuenta que era el año 1969 y la afición por la ufología era emergente-.

¿Qué fue aquella misteriosa luz? ¿Un fenómeno atmosférico? ¿Algún tipo de experimento tecnológico? ¿O una visita de origen desconocido? Las preguntas siguen abiertas, pero lo que es seguro es que aquella noche en Aracena algo caló para siempre en la memoria de tres mujeres y sus familias.

*Para cualquier consulta de temas paranormales no dudes en escribirnos y contárnosla a contacto@josemanuelgarciabautista.net