La temporada estival es sinónimo de contratación en el sector servicios en la provincia de Huelva. El turismo de sol y playa que llega hasta tierras onubenses es la consecuencia directa de un mayor número de rúbricas laborales durante los meses de verano. El ejercicio pasado, en plena pandemia azotando el país y con multitud de medidas restrictivas, el turismo se quedó por los suelos firmando los peores registros en esta esquina del sur occidental. La cruz de una moneda que este curso se ha volteado casi al completo con otro aire en el ambiente, en el ocio, y en la cifra de visitantes. Un ejemplo claro es la contratación en la hostelería durante los meses de junio, julio y agosto en Huelva, que ha crecido un 47,9% con respecto al ejercicio de 2020, según un estudio de Randstad, que ha analizado el comportamiento del mercado laboral en el sector de la hostelería durante el período estival.

De esta forma, el año pasado se firmaron un total de 17.975 contratos hosteleros mientras que en este curso la cifra ha alcanzado los 26.583. Y aun así, a pesar del crecimiento y del volumen de contratación, Huelva no se encuentra entre los mejores posicionados de Andalucía ni del país. Y es que la variación media regional es de un 61,1% mientras que la nacional es de un 76%. Este aumento en la contratación de la hostelería se da en mejores porcentajes en provincias como Almería (50,7%), Córdoba (86,3%), Granada (68,2%), Málaga (87,3%) y Sevilla (98,8%).

Málaga, Cádiz y Sevilla son las tres provincias en las que se firmaron el mayor número de contratos en Andalucía. Además, según el informe se refleja que el 23,8% del total de acuerdos laborales en España en el marco de la hostelería se rubricaron en Andalucía. Es decir, casi uno de cada cuatro contratos.

“El destacable incremento de la contratación experimentado este año en el sector hostelero, uno de los más importantes del país, se traduce como un síntoma incuestionable de la recuperación, sin duda una gran noticia para nuestra economía. Pero para que esta recuperación sea completa, deberíamos ver crecimientos generalizados de la contratación en otros sectores”, asegura Valentín Bote, director de Randstad Research.En el conjunto del país, Randstad revela que la hostelería ha generado durante la campaña de verano, es decir, durante los meses de junio, junio y agosto, 912.401 contratos. Una cifra un 76% superior a la del año pasado, cuando se registraron 518.263 contratos, pero aún un 28,8% inferior a los 1.281.964 firmados en 2019, antes del estallido de la pandemia.

De hecho, el volumen de contratos recogidos durante 2019 fue el más alto de los últimos diez años. Este indicador del mercado laboral no ha dejado de crecer hasta entonces, un incremento interrumpido por la pandemia en 2020 y que provocó que los contratos en hostelería cayesen un 59,6%, hasta las 518.263 firmas. Este año, el número de firmas ha experimentado un notable rebote, al crecer un 76% y alcanzar los 912.401 contratos. El volumen de este año está al nivel del obtenido en el verano de 2014, cuando se firmaron 908.436.

El estudio también muestra a nivel nacional datos de la edad de los contratados. En este sentido, casi la mitad (47,9%) de los acuerdos laborales lo firmaron personas que tienen entre 25 y 45 años, seguido de los menores de 25 años (30,6%) y de los mayores de 45, a quienes correspondieron el 21,5% de los contratos hosteleros firmados. Con respecto al año pasado, el mayor incremento se ha dado entre los menores de 25 años, un 83% más, seguido de cerca por el de los mayores de 45, con un crecimiento del 82%. Por su parte, el colectivo de entre 25 y 45 años se incrementó en un 69%.