Huelva

Siete bomberos de Huelva se juegan la vida para salvar a las víctimas del terremoto de Marruecos

Los bomberos de Huelva se preparan para salir a Marruecos a salvar vidas

Los bomberos de Huelva se preparan para salir a Marruecos a salvar vidas / JOSUE CORREA (Huelva)

Siete bomberos partieron ayer desde Huelva hasta Marruecos para ayudar a los afectados por el devastador terremoto que ha acabado con la vida de cerca de un millar de personas. El terremoto de 6,9 grados de magnitud en la escala de Richter registrado en Marrakech a las 00:14 del sábado, se dejó sentir en numerosos pueblos de la provincia de Huelva y en la capital creando alarma entre numerosos ciudadanos.

La gran catástrofe que se vive en el país árabe ha sacudido a medio mundo. Y es por ello que desde Huelva ya está en marcha la labor humanitaria. Cinco bomberos se unirán al equipo de Bomberos Unidos sin Fronteras: tres del parque de bomberos de Huelva, otro del Consorcio Provincial y otro de Refinería. Además, cuatro perros de rescate equipados con material de desescombro y salvamento. Por su parte, otros dos bomberos más del Consorcio Provincial salieron desde la capital para formar parte del contingente de Bomberos para el Mundo.

Teniendo en cuenta que este dispositivo tiene que ser lo más polivalente y autónomo posible para poder afrontar todas las fases que se presentan en un rescate de estas características, cuentan en su equipo con material sanitario para que el personal de la unidad médica pueda estabilizar a las víctimas que se localicen. Para poder trabajar con eficacia, en el parque de bomberos de Huelva ayer preparaban a toda prisa el material necesario, agrupado en 15 arcones, en los que tres llevan la comida para estos profesionales.

El presidente de Bomberos sin Fronteras en Huelva y responsable de la Unidad Canina de Rescate de los Bomberos onubenses, Antonio Nogales, contaba a este periódico que desde las 00:30 del sábado, cuando recibieron las primeras noticias, estuvieron preparándose para el rescate. "Conforme íbamos evaluando la situación comenzamos a poner en marcha el contingente", indicaba Nogales.

Con la experiencia de haber trabajado también en el terremoto de Alhucemas en 2004 (cerca de la costa del norte de Marruecos), esperan enfrentarse a "colapsos muy diseminados, tanto en zonas rurales como en otros núcleos más grandes". Asegura que todo el trabajo no va a estar concentrado en una sola ciudad, sino que serán muchos los puntos que requerirán de la ayuda de los bomberos. 

Aún no saben cuánto tiempo estarán fuera, ya que "va a depender de lo que se encuentren". En principio, irán a cubrir las necesidades que hayan desde el punto de vista del rescate, la localización de las personas con vida y su posterior estabilización sanitaria.

Desde el parque onubense, que gestiona el Ayuntamiento, salió todo el material, incluidas las dos furgonetas con las que se moverán en suelo marroquí después de llegar la pasada noche a las 23:00. Para poder hacer su trabajo lo mejor posible, van a acompañados de perros especialistas en la búsqueda de personas sepultadas con vida. Desde Huelva han salido un veterano, Piero, y casi un debutante, Otto, que hizo su primer trabajo similar en el terremoto de Turquía el pasado febrero.

Antonio Nogales, portavoz de los bomberos, ha explicado que trabajarán con la premisa de "intentar ser lo más polivalente posible y no generar ningún problema para las autoridades", de modo que viajan "con las herramientas de localización de las personas vivas, que son nuestros ejemplares caninos, los perros, y llevamos todo el material de desescombro, de salvamento, campamento, incluso material sanitario, para que el personal nuestro de la unidad médica pueda también estabilizar a las víctimas que se rescatan".

Los perros que viajan están continuamente con sus guías, como señalaba uno de ellos, Luis Felipe Sández, que destacaba que lo que se hace es "un mantenimiento operativo a través de prácticas semanales para estar siempre preparados para una situación como esta", y se consigue que los animales detecten a personas vivas bajo la superficie, "y se ponen a ladrar", o bien personas muertas, y en ese caso "dan vueltas en círculos alrededor de donde está la persona fallecida".

Para poder viajar, existe un convenio entre el Ayuntamiento de Huelva y Bomberos Unidos sin Fronteras, además de contar con la complicidad de sus compañeros, que les cubren en los turnos que tendrían que estar ellos para que el servicio del parque no se debilite en ningún momento.

Una vez en suelo marroquí acudirán a la zona que les indiquen las autoridades locales, con la premisa de que el de este sábado ha sido "un terremoto bastante violento, muy poco profundo y de una intensidad importante, con lo que ha abarcado muchísimo territorio y esperamos encontrarnos zonas diseminadas, pequeñas aldeas donde no habrán llegado todavía los grupos de rescate".

Una vez allí, trabajarán hasta que no tengan fuerzas, dormirán y comerán donde y cuando puedan y procurarán mantener la entereza si lo que sale de debajo de los escombros no es alguien con vida. Estar mentalizado para eso también forma parte de su entrenamiento.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios