El Ayuntamiento de Huelva propone cambiar el uso sociocultural de la parcela de la Casa de Diego Díaz Hierro a residencial

El Ayuntamiento de Huelva propone cambiar el uso sociocultural de la parcela de la Casa de Diego Díaz Hierro a residencial, una iniciativa que somete a información pública. Plantea el cambio de calificación urbanística de uso dotacional a residencial de viviendas en régimen libre, en base a "una actuación de mejora urbana". Argumenta, que el inmueble, ubicado en el número 27 de la calle Fernando El Católico, esquina con San Salvador, lleva años cerrado y no se ha destinado al uso dotacional previsto, lo que supone "un deterioro urbano, infrautilización del patrimonio edificado y un impacto negativo en el entorno inmediato".

Indica que el cambio de uso de la parcela viene motivado por "una estrategia de ciudad para la obtención urgente de suelo destinado a la construcción de vivienda adecuada para la demanda insatisfecha, en el contexto de una situación de emergencia habitacional, y en el marco político y normativo de la Agenda para impulsar la vivienda en Andalucía articulada por el Decreto-Ley de Medidas Urgentes en materia de Vivienda, aprobado en el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía".

Incide en que existe en Huelva "una gran necesidad de nuevas viviendas y en esta zona en particular donde apenas quedan parcelas vacantes", apostando en este caso en concreto por la vivienda libre, un residencial plurifamiliar. Se recalca que mantener el uso sociocultural supondría "la consolidación del abandono y el deterioro de la edificación, generando riesgos de insalubridad y pérdida de valor urbano", por lo que considera el cambio de uso a residencial plurifamiliar libre, "posibilitando la colmatación de la manzana y la activación del entorno urbano", la alternativa "más conveniente para el desarrollo de los objetivos de ordenación urbanística propuestos".

El grado de protección otorgado a la Casa de Diego Díaz Hierro, incluida en su ficha en el Catálogo de Edificios, Elementos y Espacios Urbanos de Valores Singulares del Plan Especial de Reforma Interior del Casco, permite la demolición del inmueble y la posterior reconstrucción de su fachada. Se trata de un edificio, de una planta de altura, proyectado en 1907 por Francisco Monís, "con cierto valor histórico y arquitectónico". Su diseño responde a la arquitectura local de finales del XIX y principios del XX, con ventanas y puertas decorados con pequeñas cornisas de estilo neoclásico, y remate de fachada con zócalo y cornisa en ladrillo visto, más peto macizo.

El grado de protección, de hecho, contempla la construcción de un edificio de nueva planta, que pueda tener uso dotacional en planta baja y otros usos en el resto de plantas (cuatro plantas más ático), con la que completará la estética actual de la manzana.