Un aeropuerto en Gibraleón generaría un impacto económico de 1.150 millones de euros en la provincia de Huelva, además de 55 millones de euros de ingresos anuales para las administraciones públicas.

El nuevo aeropuerto ‘Cristóbal Colón’ aportaría 400.000 nuevos turistas internacionales que supondrían más de 12.000 puestos de trabajo directos e indirectos. No necesitaría financiación pública y se destinaría sólo a carga y vuelos chárter.

¿Por qué no se construye entonces?

El Libro Blanco de las Infraestructuras realizado por el Consejo Económico y Social de la provincia de Huelva (CESpH), a petición de la Diputación Onubense, lo considera “necesario e indispensable” para el desarrollo socioeconómico de la provincia y desmonta ‘ciertos mitos’ y excusas que se han ido repitiendo estos años para no llevar a cabo esta infraestructura.

El CESpH derriba el argumento de que no es necesario al encontrarse entre dos aeropuertos como Sevilla y Faro. “El transporte por carreteras es eficaz si la distancia está entre 300 y 700 kilómetros, el ferrocarril entre 700 y 1.000 kilómetros y el avión a partir de esa distancia. En Huelva, los productos de las berrys van a más de 1.000 kilómetros, somos un destino turístico con personas que llegan desde miles de kilómetros, además de proporcionar una conexión ágil con el resto del mundo”.

Un aeropuerto es posible en la provincia si se ubica en el término municipal de Gibraleón junto a la autopista A-49, que se ha demostrado un lugar “idóneo y contrastado”, ocupando una parte del espacio aéreo de Cartaya fuera de la servidumbre militar.

Además, el impacto ambiental es más reducido que el provocado por el transporte terrestre de productos agrícolas ya que lo transportado por 72 camiones equivaldría a la carga de un vuelo.

Características

El nombre que se ha propuesto hasta ahora sería el de Aeropuerto de Cristóbal Colón de Huelva. El tipo de aeropuerto que se pretende construir en Huelva sería con un edificio para la terminal sencillo y práctico con menos de 7.000 metros cuadrados, un parking de 700 plazas y una pista con una longitud de 2.700 metros. Todo ello sobre una superficie de 286 hectáreas. La capacidad máxima que podría albergar el aeropuerto onubense estaría en una horquilla de entre un millón y un millón y medio de pasajeros.

Turismo

El aeropuerto Cristóbal Colón de Huelva respondería a tres objetivos fundamentales. El primero es el del turismo con un aprovechamiento de las sinergias que se produzcan en su entorno como consecuencia de la construcción y funcionamiento del aeropuerto, siendo catalizador de un turismo internacional muy poco presente hasta ahora en la provincia. Supondría una reducción de la estacionalidad extrema de la provincia. Ahora estamos en tres meses y la media nacional es de ocho meses.

Además, pondría en valor el desarrollo hotelero existente en la provincia de Huelva, logrando la creación de un auténtico destino turístico y una mayor profesionalización y mejora del empleo existente. La captación de tráfico turístico como base principal del negocio a través de compañías de bajo coste y chárter.

Agricultura

La producción de frutos rojos de la provincia de Huelva supone el 97% de la producción nacional (30% de la producción europea) y el 86% se destina a exportación, llegando al 11% PIB Provincial.

Durante la campaña 2021/22 las exportaciones de frutos rojos alcanzaron un valor de 1.392 millones de euros aportando hasta el 70% del empleo en el sector agrario de la provincia.

Con el nuevo aeropuerto Cristóbal Colón se potenciaría la exportación de frutos rojos por vía aérea, se reduciría la huella carbono, se podría crear una única marca de frutos rojos que garantice una venta conjunta de productores locales y se optimizaría el precio de venta gracias al nulo deterioro del producto por la rapidez del transporte al destino. La sociedad promotora del aeropuerto ha mantenido ya un contacto previo con el aeropuerto a 50 km de Bruselas como posible receptor.

Hidrógeno verde

Dentro de la nueva estrategia de sostenibilidad de la provincia de Huelva se potenciaría el uso del hidrógeno como consumible para aviones con el compromiso de ser el aeropuerto más sostenible de Europa puesto que al ser de nueva construcción se aplicarán medidas extras y actuales.