Veinticinco formas de hacer arte reciclando
Las obras del certamen Reciclar del programa Recapacicla se exponen en la Casa Colón
La creación artística y el reciclaje son la base del certamen Reciclar Arte, enmarcado en el programa de educación ambiental Recapacicla, una iniciativa promovida por la Junta de Andalucía, en colaboración con la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, Ecoembes y Ecovidrio, cuya finalidad es fomentar el consumo responsable y el reciclado de los residuos. Setenta y cinco artistas han participado en la cuarta edición del concurso. La obra Reciclante. Tú consumes que nosotros reciclamos, de Antonio Pérez, se alzó con el primer premio, siendo el segundo para Envolvente, de Matilde Navarro y el tercero para La gota de agua, de Gianluca Stasi.
Una exposición muestra hasta el 28 de junio en el Salón Iberoamericano de la Casa Colón, una selección de veinticinco obras, entre las que se encuentran las premiadas, composiciones en las que se han utilizado una gran variedad de materiales (botellas, Cds, hierros, latas, madera, bombillas, tubos fluorescentes, tapones de corcho y plástico...), a los que se les ha dado un nuevo uso, convirtiéndolos en auténticas obras de arte.
Reciclante. Tú consumes que nosotros reciclamos, la obra ganadora, es una serie de diez fotografías en la que el autor muestra como adolescentes recogen basura electrónica en el vertedero de Agbogbloshie de Acra (Ghana); Envolvente, el segundo premio, es una instalación realizada con estructuras metálicas de colchones y envoltorios de plástico, y La gota de agua, el tercer premio, es una escultura realizada, entre otros materiales, con bandas de persianas, mallas de plástico y un paraguas roto, y está concebida como un atrapaniebla.
Junto a estas tres piezas se pueden admirar Instante poético 1 (Conde de Ureña), de Anais Angulo Delgado, una escultura hecha con dos mesitas de noche; Cartoon contradictorio, de Álvaro Castaño, un collage en el que ha empleado el cartón para plasmar el rostro de un niño; Otoño, de Luis Cruz, una escultura ensamblaje creada con maderas y tapones de plástico; Green box, de Marta de Pablos, una escultura en la que ha utilizado botellas de vidrio tratadas con la técnica Fussing; Reminimal, de Alberto Desiles, una instalación con tubos fluorescentes; las esculturas Pompero automático y Trono, de Yonathan Espejo y Paco Espinar; así como la instalación Libelulatas, de Silvia Saldaña y la escultura Arrojadas, de Benito Pintado, hechas con latas.
La botellas de vidrio son la materia prima de las esculturas Jaleo nº1, de David Fernández, y Límpida, de Benito Pintado; y las telas del mosaico Con los pies en el suelo, de Mª Auxiliadora López, la escultura La máxima expresión de la verdad, de Veredas López, y el collage Urdimbre de luz al son del viernes y la escultura ADN del Color -ambas con CDs como base-, de Carmen Moreno.
La selección de obras se completa con Huerto eléctrico, de Tomás González; La revolución de las luces, de Aurélien Lortet; Plastece vital, de Lucía Marchesin; Esencia nazarí, de Belén Rodríguez, una instalación hecha con tapones de corcho inspirada en una torre defensiva; Factoría hombre río, de Rafael Ruiz y Francisco Marcos, una escultura con la que tratan de recuperar el arte cinético; Sobrantes, de Luisa Alba, y Pedaleando hacia el futuro, de Antonio Sánchez, una escultura hecha con chatarra.
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