Nono Ortiz: "Tengo insomnio al pensar en todo lo que voy a vivir durante estos días"
Rey Baltasar
"Pido salud para una ciudad que amo con locura y de la que me siento un profeta"
"El ser Rey Mago es el colofón más especial a una gran trayectoria de vivencias en Huelva"
La figura de Nono Ortiz se define por la incesante pasión que despierta en él la ciudad de Huelva. El Rey Baltasar en 2020 es una persona que guarda un estrecho vínculo con las diferentes manifestaciones populares y religiosas, habiendo sido partícipe de los carnavales, El Rocío o la Semana Santa. Actualmente, es monitor de la Escuela Hípica que dirige, Hermano Mayor de la Hermandad del Rocío de Emigrantes para la Romería 2020 y torilero de la Plaza de Toros de la Merced desde el año 2001.
-¿Qué se siente cuando se recibe la llamada del alcalde para ser nombrado Rey Mago?
-Fue un momento inolvidable. De hecho, confieso que me eché a llorar de la emoción que me causó. Por tradición, el alcalde, Gabriel Cruz realiza esta llamada el día de Nochebuena, pero en un primer momento he de reconocer que yo pensé que era simplemente para felicitarme la Navidad en un tono amistoso. Cuando ya me comunica que desea que yo sea Rey Mago por la pasión que siento por Huelva y por mi implicación con la ciudad, estallo de emoción. Ahora bien, una de las cosas más duras es no poder revelar a tus seres queridos que vas a ser Rey Mago, en tanto que tenemos que esperar unos días para que se haga público. Sin embargo, me alegro de haber guardado la noticia por el boom que se creó luego.
-¿Cómo está llevando estos días de preparación?
-He de confesar que ni duermo, tengo insomnio de la emoción que me provoca la idea de pensar en todo lo que voy a poder vivir. Ahora bien, trato de aprovechar cada momento al máximo, desde la coronación, que fue un acto muy entrañable, hasta las comparecencias en los medios, además de responder a todos los mensajes de felicitación que me van llegando.
-Le ha tocado el Rey Baltasar, ¿qué le parece encarnarlo?
-Pues, casualmente, es mi preferido, ya que es un rey que destaca por su efusividad. Al principio sí que es cierto que no te comentan el rey que encarnarás, pero cuando me lo comunicaron me dio mucha alegría. Además, también estoy muy contento por los otros nombramientos, porque son excelentes personas y seguro que haremos un buen equipo.
-¿Qué pide usted para la ciudad de Huelva en 2020?
-Lo principal que pido es salud para una ciudad y provincia de la que me siento muy afortunado. Al fin al cabo, soy una persona de la calle y me siento profeta en una tierra que amo con locura.
-Estando tan vinculado a la ciudad, ¿no puede haber un mejor colofón para premiar su dedicación?
-Creo que es el colofón más especial a una gran trayectoria de vivencias en Huelva, pues, al fin y al cabo, soy una persona muy vinculada a El Rocío, a los toros, a la Semana Santa o a los carnavales. Por ello, mi deseo es que todos miren al Rey Baltasar como una persona muy querida y de Huelva, porque les va a traer cariño, amor y regalos.
-¿Podría decantarse por alguno de los momentos que tiene que afrontar en estos días?
-Para abordar esta cuestión he de basarme en lo que me han comentado anteriores Reyes Magos. Por ello, creo que lo que más ilusión puede hacerme es la visita a los hospitales y a los asilos. Sin embargo, cada momento tiene su particular encanto, en tanto que la cabalgata es un momento de efusividad con el lanzamiento de caramelos y en la recepción de cartas es cuando tienes un trato más cercano con los pequeños, quiénes derrocharán ilusión y me contarán sus anécdotas y peticiones para este año.
-¿Ha podido entonces hablar con otros Reyes Magos?
-Claro. He hablado con Paco Millán, Alberto Domínguez y Manuel Jesús Rubio y los tres coincidían en que es una experiencia imborrable e irrepetible. Con todas estas palabras de ilusión que me han transmitido en los últimos días, yo me siento un privilegiado. De hecho, ni siquiera sé cómo tendré capacidad para afrontar todo esto, no tengo ni la más remota idea.
-Queda un día para la cabalgata, ¿lo tiene todo a punto?
-A decir verdad me faltan unos pocos detalles y retoques. De hecho, la elección de los pajes se ha demorado bastante, pues al solo poder llevar seis pajes, es muy difícil elegir. Desde mi punto de vista es la parte gris de la misión de ser Rey Mago porque tengo en mi entorno a más de seis personas que merecerían estar conmigo ese día. Por ello, me hubiera gustado compartir con más amigos míos esta experiencia, aunque estoy seguro de que todos los que no han podido subirse en la carroza disfrutarán conmigo el día 5.
-¿A alguien le traerá carbón?
-No tengo pensado que nadie reciba carbón esa noche porque el que me quiere me quiere y el que no, voy a intentar que me vea como una buena persona y buen Rey Mago.
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