A finales de la década de los 90 comenzó a consolidarse el número de incendios provocados en Huelva. Fue un punto de inflexión en la provincia. El año 2000, ya superaban en número al de incendios fortuitos. Este hecho fue decisivo para que el Plan Infoca decidiera poner todos los medios a su disposión para atacar la actividad de los pirómanos en la provincia. 

Caza al pirómano en Huelva

A través de un especial, Huelva Información se hacía eco aquel mes mayo de 2000 de un problema que comenzaba a afectar de forma decisiva a los bosques y montes de Huelva. Las estadísticas eran aplastantes, 526 hectareas quemadas, tanto arboladas como de matorral se perdieron apenas un año antes. Aunque el techo lo tocó Huelva en el año 1991, cuando se quemaron 21.878 hectáreas en más de 165 incendios. 

Evolución de incendios en la década de los 90

Con la decada de los 2000 en marcha, el Plan Infoca contaba ya con el apoyo de un avión de 12.000 litros de capacidad, otro de 1.500, un aparato de observación, un helicóptero de transportes y otro de extinción además de 202 vehículos. Un material con el que buscaban acabar con los incendios provocados. 

Ecologistas pidiendo medidas preventivas

Los ecologistas por su parte, y la ciudadanía en general, no cesaban de pedir más apoyo a una tarea imprescindible en una provincia donde el clima iba dejando cada año un verano más largo y caluroso. Un cambio climático que estamos sufriendo hoy, 23 años después, y para el que se precisan cada vez más programas humanos y técnicos además de concienciación para acabar con el.