Literatura inglesa en el cine

Recordarán que destacábamos en esta página el pasado día 14 el buen criterio de difundir estas películas, joyas de la literatura inglesa, que tanto facilitan el conocimiento del lenguaje en este ciclo sobre 'La Literatura Inglesa en el Cine', programado por la Concejalía de Turismo del Ayuntamiento de Huelva. Un magnífico ejemplo para inaugurarlo es esta película. Estamos ante una nueva versión de la obra de prestigio universal Orgullo y prejuicio, famosa novela de Jane Austen, sobre la sociedad clasista inglesa del siglo XVIII, que no es la primera vez que se lleva al cine. Se ha demostrado que la escritora, digna representante de la transición de la literatura inglesa del neoclasicismo del siglo XVIII al romanticismo del siglo XIX, sigue teniendo atractivos cinematográficos. Sabido es que sus novelas Sentido y sensibilidad y Emma, fueron llevadas a la pantalla. La primera por Ang Lee en 1995, y la segunda un año después bajo la dirección de Douglas McGrath. Orgullo y prejuicio, conoció su primera versión para la gran pantalla en 1940, dirigida por Robert Z. Leonard y protagonizada por Lawrence Olivier y Greer Garson y ha sido adaptada en cinco ocasiones para series televisivas.

Ahora es el debutante Joe Wright, prestigioso realizador de televisión, quien dirige esta nueva versión que nos lleva a la campiña inglesa, el Condado de Hertfordshire, a finales del siglo XVIII, adonde llegan el acaudalado Sir Charles Bingley y su presuntuoso amigo, el señor Darcy. Esto aviva las ilusiones de la señora Bennet de casar a sus cinco hijas con maridos potentados. Surgen los orgullos y los prejuicios de unos y de otros, singularmente de una de las hermanas, junto a la indiferencia del padre, y la intransigencia de la poderosa e intolerante Lady Catherine de Bourg, clásica representante del snobismo inglés.

El realizador, fiel al texto original, en una inspirada dicotomía entre literatura y cine, emprende con agudeza un profundo análisis, acerado a veces, mordaz casi siempre, cáustico y cruel, de la sociedad de ese tiempo. Pero lo hace a la vez con fino humor, una hiriente ironía, un sarcasmo sutil y hasta cierta aviesa comicidad en algunos pasajes. Por lo que se refiere a su puesta en escena ésta no puede ser más brillante. No sólo en el retrato sólido de una situación sino en su exacto funcionamiento fílmico, en el planteamiento de las secuencias, resueltas algunas en espléndidos planos resolutivos, descritos con sensibilidad y emoción, el movimiento de los personajes, en la clara definición de estos, en la deslumbrante plasticidad de los paisajes y la suntuosidad de los escenarios interiores y exteriores donde se desarrollan los acontecimientos.

Un gran reparto de intérpretes del cine británico encabezado por la magnífica Keira Knightley, candidata al 'Oscar' a la mejor interpretación femenina protagonista, con un soberbio elenco perfectamente ajustado a la descripción de los personajes, y donde aparece también, breve pero convincente, Judy Dench, nominada y premiada como la Mejor Actriz a los 'Oscar' de Hollywood por su actuación en la película Mrs. Henderson presents, ese mismo año. Una extraordinaria película donde las mujeres son exquisitas protagonistas.