El frío tiene las horas contadas en Huelva estos días. A partir de este jueves, los termómetros comenzarán un ligero ascenso tras los registros alcanzados estas últimas semanas tras los sucesivos temporales de lluvia y viento. En este sentido y según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), para esta jornada, las máximas podrían alcanzar los 23 grados en algunos puntos de la provincia, entre ellos la capital. Mientras, para las mínimas, también soportarán un leve ascenso, situándose en 13 grados a primeras horas de la mañana y a última de la noche. 

Pese a todo, los cielos permanecerán muy nubosos durante toda la jornada y habrá alguna mínima posibilidad de chubascos hasta el mediodía. Habrá mínimas rachas de viento de hasta 10 km/h que rolarán de norte a noroeste durante las horas centrales del día. 

En cuanto a la sensación térmica se mantendrá similar a la ofrecida por los sistemas de medición, situándose entre los 14 y los 22 grados. La humedad se mantendrá alta, como es habitual en la provincia, entre los 55-90% con tendencia a subir. 

Este panorama se mantendrá, previsiblemente, durante lo que queda de semana. Para el viernes se disipa la posibilidad de chubascos, aunque se mantienen los cielos cubiertos. Las máximas y mínimas oscilarán entre los 10 y los 21 grados, respectivamente. En el caso del fin de semana, las nubes tenderán a ser altas, y el mercurio irá al alza entre los 14 y los 22 grados.

Será una tendencia que, de confirmarse los modelos, harán aumentar las tempraturas mínimas la próxima semana. Para estas fechas ya comienza a hablarse de que los termómetros podrían registrar temperaturas casi primaverales, con máximas de hasta 27 grados en varios puntos de la provincia, especialmente en el interior. Esta nueva situación anticiclónica hará que nos volvamos a desprender nuevamente del chaquetón y demos paso al jersey o a una pequeña pieza de abrigo durante las primeras horas del día. 

En el caso de la capital, las mínimas oscilarán entre los 13 y los 14 grados, una temperatura que permitiría hablar de un nuevo "veranillo" en el mes de noviembre. Aún es pronto para conocer cuánto tiempo se mantendrá esta estabilidad y si después de ella volverán las lluvias o habrá que esperar algunas semanas más para tratar de mantener los niveles logrados en los embalses con las últimas precipitaciones de las borrascas Celine, Bernard y Domingos.