Nueve vías de Huelva, entre la calle Puerto y la Plaza de la Merced, cambiarán de dirección. El cambio será efectivo desde el 2 de febrero. Las calles afectadas son San José, Ciudad de Aracena, Ginés Martín, Vázquez Limón, Aragón, Jacobo del Barco, Amado de Lázaro, Rui Vélez y el tramo de Paseo de Independencia en la Plaza de la Merced, el resto de la vía, entre la Plaza de la Merced y la plaza de toros seguirá con el mismo sentido. Modificaciones todas ellas motivadas por las peatonalizaciones que se están realizando en la zona centro de la capital onubense.

El primer teniente de alcalde y responsable de Urbanismo y Medio Ambiente, Felipe Arias, acompañado por la concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Milagros Rodríguez, dio a conocer el nuevo orden de circulación de tráfico. Explicó que se llevará a cabo en dos fases, una primera que se iniciará el 29 de enero y comprenderá las calles Aragón, Amado de Lázaro, Rui Vélez y Jacobo del Barco y en la que se realizarán todos los trabajos de semaforización y señalización horizontal y vertical, y una segunda que se acometerá a partir del 1 de febrero, con las calles Ciudad de Aracena, Ginés Martín, Vázquez Limón, San José y tramo de Paseo Independencia.

Arias indicó que la peatonalización de la Plaza de San Pedro obliga a cambiar la dirección de la calle Aragón. Asimismo, señaló que con estas modificaciones en el tráfico se "descongestiona la calle Ruiz de Alda, que es un punto negro. También se descongestiona la calle Puerto, que no cambia de dirección, al darle salida a la calle Ciudad de Aracena.  

Plano de los cambios.

Apuntó que cuando los cambios de circulación sean efectivos, los primeros días habrá una mayor presencia de agentes de la Policía Local para indicar a los conductores por dónde deben dirigirse. Señaló que estas modificaciones contribuirán además a darle una mayor agilidad al transporte público, acortando los tiempos.

El responsable de Urbanismo y Medio Ambiente manifestó que las actuaciones de peatonalización en la zona centro de la ciudad implican nuevas dinámicas de movilidad que exigen una adaptación a la gestión del tráfico para garantizar la seguridad y la eficiencia de los ciudadanos en sus desplazamientos". Subrayó que "queremos compatibilizar una mejor circulación rodada con una mejor accesibilidad peatonal, con una protección al peatón pero al mismo tiempo racionalizar el tráfico, hacerlo más fluido y evitar los problemas de grandes rodeos que había que dar en la ciudad a consecuencia de una falta de planificación tanto en la ejecución de las obras como en movilidad".

Recalcó que el actual equipo de gobierno "lo que ha hecho es planificar consensuadamente las obras no sólo con los ciudadanos sino teniendo en cuenta a los profesionales, a los técnicos". Indicó que "la desorganización tanto en la planificación de las obras como la falta de coordinación entre obras y movilidad estaba produciendo que circular en la ciudad fuera un caos. Los taxistas como los residentes en el centro tenían que dar grandes vueltas por toda la ciudad para llegar a su casa o para salir del centro".

Aseguró que con las modificaciones planteadas "lo que hacemos es garantizar la salida y llegada al centro con una circulación lógica y dinámica, con esto pretendemos mejorar la movilidad de la ciudad en su conjunto, con estas nueve calles lo hacemos de una forma conjunta y lógica para facilitar a los residentes de la zona centro la salida y la llegada a sus casas, pero también mejorar la fluidez del tráfico, del transporte público, de la carga y la descarga, de los usuarios en bicicleta, el peatón, así como de todas las actuaciones que se hacen respecto a movilidad".