Ence invirtió 8 millones en mejoras ambientales en 2007

Un año más, Ence-Huelva se siente orgullosa de su gestión y de lo conseguido. Con esta actitud, el presidente de la fábrica de celulosa, Isidro García Téllez, presentó ayer la declaración ambiental anual correspondiente a 2007. Según versa en el documento, Ence-Huelva invirtió el año pasado 8,3 millones de euros en mejoras medioambientales y mantuvo sus certificaciones de calidad y gestión ambiental y su acreditación europea dentro del registro de empresas voluntariamente adheridas al reglamento de Ecogestión y Ecoauditoría (Emas).

Tal y como se resume en la declaración ambiental, en 2007 destacan las mejoras alcanzadas en el efluente líquido gracias a la mejor operación de las plantas y al esfuerzo de coordinación para hacer campañas de producto adaptado a las necesidades reales de los clientes en función del papel que fabrican. Del informe, es de destacar también el índice alcanzado en valorización de residuos sólidos, que supera el 92% y que sitúa en 13,7 kilos por tonelada de celulosa el total de residuos generados que deben ir al depósito.

En cuanto al resto de inversiones realizadas durante el 2007, despuntan las destinadas a corregir deficiencias de las instalaciones de combustión, a las que se ha destinado 4,5 millones de euros lo que supone la mitad del montante económico invertido en todo el año pasado. En este sentido, el director destacó que en 2008 se va a seguir invirtiendo otros seis millones de euros en las calderas y equipos asociados para seguir mejorando los resultados ambientales en atmósfera y aumentar la eficiencia energética a partir de fuentes renovables como es la biomasa.

Isidro García Téllez estuvo acompañado en la presentación del documento por Silvia Cortinas Fernández, la jefa del departamento de Medio Ambiente de Ence-Huelva, quien subrayó que la mejora ambiental y el aumento de la eficiencia energética son los dos criterios en los que la empresa está basando su crecimiento. Los resultados de esta conciencia con la que gestionan la fábrica se traducen en una reducción al 4% del uso del combustible fósil en 2007, frente al 96% que supone ya la biomasa en el total de combustibles empleados en la fábrica onubense.

La responsabilidad social de la empresa también está muy presente en la dirección de la fábrica tal y como demuestra Ence con la utilización de fuentes de energía renovables. Además, todas sus plantaciones fijan CO2 contribuyendo a mejorar las condiciones ambientales de la sociedad, según precisó Silvia Cortinas.

Tal y como se resume en la declaración ambiental de 2007, el año pasado ha supuesto el cierre de un ciclo marcado por la Ley Europea de Prevención y Control Integrado de Contaminación. Según explicaron los responsables de la fábrica, tras cuatro años de trabajo con una inversión de 25 millones de euros, 8 millones más de lo previsto por la empresa, la fábrica onubense de celulosa afronta 2008 con la Autorización Ambiental Integrada obtenida y con las tecnologías recomendadas para el sector pastero instaladas.