Cubren los restos arqueológicos para el inicio de las obras de construcción de un bloque de viviendas y oficinas en el solar de Juguetoon, en la calle San Francisco, en la capital onubense, una superficie de 290,76 metros cuadrados. La empresa promotora y propietaria de los terrenos cuenta con el visto bueno de la Delegación territorial de Cultura y tiene licencia de obras por parte del Ayuntamiento de Huelva. La Junta de Gobierno local, en sesión celebrada el pasado 29 de enero, acordó conceder la licencia para la construcción de un edificio de cuatro plantas de altura, con dos viviendas, una en la planta segunda y otra en la tercera; una oficina en la planta primera y un local de oficina en la planta baja. En la planta baja también se incluye un garaje con dos plazas de estacionamiento.

Los trabajos de construcción de la edificación serán compatibles con la conservación del hallazgo y se deja la puerta abierta para una posible exposición del mismo. El proyecto arquitectónico planteado inicialmente se tuvo que cambiar debido a la aparición de los restos durante la actividad arqueológica preventiva, originariamente era un edificio residencial plurifamiliar con planta sótano para garaje.

El pilotaje se realizará salvando aquellos puntos en los que hay restos arqueológicos con el fin de que estos no sean afectados por la futura construcción, de hecho se ha modificado la cimentación en varias ocasiones para compatibilizarla con la conservación de los restos arqueológicos, que han sido protegidos con un geotextil y una capa de tierra con el fin fe evitar posibles afecciones en el proceso de la cimentación.

Durante los trabajos arqueológicos se encontraron en el solar partes de muros de cronología protohistórica. La intervención arqueológica ha permitido documentar una amplia secuencia histórica, partiendo de restos del periodo orientalizante, partes de muros datados entre los siglos VIII y VI aC, perteneciente a espacios de almacenamiento, relacionados con actividades portuarias, pasando por estructuras funerarias de una necrópolis romana, de los siglos III-IV dC, hasta llegar a la época moderna con la aparición de pavimentos e infraestructuras hidráulicas de la vivienda demolida en el solar. Las obras de demolición del inmueble se llevaron a cabo en el año 2019.

Parte de los restos hallados.

Tras la finalización de los trabajos arqueológicos en el solar, desde Cultura se determina, teniendo en cuenta los resultados de las catas, como medida de preservación y propuesta de conservación de lo hallado, el tapado de las estructuras arqueológicas excavadas y exhumadas con geotextil y arena estéril, así como un seguimiento arqueológico de los movimientos de tierra que supongan remoción del subsuelo de la parcela, prestando especial atención a la colocación de la losa de hormigón armada sobre una mejora del terreno, entendiendo que la colocación de esta losa puede suponer un riesgo de afección al patrimonio.

La Delegación territorial de Cultura ha estado siguiendo las intervenciones arqueológicas, que se iniciaron en 2019. Desde la empresa promotora de la obra y propietaria de los terrenos, que contrató como arqueólogo a Jacobo Vázquez, decano del Colegio Profesional de Arqueólogos de Sevilla y Huelva, indican que han seguido todas las pautas que les han ido marcando, siempre en contacto con la Delegación a través de su arqueólogo. Las obras ahora retomadas seguirán teniendo la supervisión de Jacobo Vázquez y de Cultura. 

Los restos arqueológicos ya han sido protegidos con un geotextil y tierra y quedarán ocultos. Las obras de construcción han comenzado con el movimiento de tierra, a lo que seguirá la cimentación. Aunque desde la Delegación territorial de Cultura no lo han pedido, por parte de la empresa promotora se ha dejado en la zona de más interés arqueológica la previsión de que a la losa de cimentación se le pueda abrir una ventana en un futuro, dejando esa zona libre sin armadura y con unas vigas perimetrales, de manera de que en unos años, si se decidiera hacerlo por cualquier motivo, ofrecer la opción de que los restos arqueológicos se puedan visibilizar.

El nuevo edificio deberá estar finalizado en quince meses. La fachada estará aplacada siguiendo los tonos ocres predominantes en el centro de Huelva, ha sido diseñada buscando vincular lo nuevo y lo antiguo.