Huelva

Cuatro años de prisión por robar en dos bares de Punta Umbría fuera del horario de apertura

  • Con la conformidad de la acusación y la defensa, la Audiencia de Huelva condena al acusado por un delito continuado de robo con fuerza

El Bar de Isidro, uno de los negocios asaltados por el caco.

El Bar de Isidro, uno de los negocios asaltados por el caco. / Google Maps (Punta Umbría)

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a cuatro años de prisión a un hombre que entró a robar en dos bares de Punta Umbría cuando estaban cerrados al público. La sentencia, analizada por Huelva Información y que ya es firme por haber sido alcanzada con la conformidad de las partes, deja claro que el acusado acumulaba todo un rosario de antecedentes penales, así como que es responsable de un delito continuado de robo con fuerza en establecimiento abierto al público fuera de las horas de apertura.

En los hechos probados se refiere que el ladrón llevó a cabo dos asaltos en establecimientos puntaumbrieños en la misma noche, la del 13 de octubre de 2020.

El primero de sus objetivos fue El Bar de Isidro, ubicado en la avenida de la Ría. Allí llegó sobre las 2:58, como se recoge en la resolución judicial, "y tras forzar con un gato mecánico o instrumento similar la reja del establecimiento, penetró en su interior y manipuló la caja registradora, sin apoderarse de ningún objeto". En este caso no tuvo éxito y el propietario del negocio no ha reclamado que se le indemnice por los desperfectos ocasionados.

Apenas un cuarto de hora más tarde, sobre las 3:15, el procesado se dirigió al bar 3.30 de la calle Ancha. Usó el mismo método para acceder al interior del local, "con el gato o instrumento similar" con el que forzó la reja de una ventana que da a la calle Montemayor.

En esta ocasión sí obtuvo botín. Sustrajo "el cajón de la caja registradora, donde había unos 790 euros en billetes y 66 euros en monedas, así como dos billetes de lotería, fracturando el ordenador TPV, un macetero, 40 copas y una cubitera".

El ladrón fue arrestado por la Guardia Civil sobre las 3:40 de esa madrugada de octubre, así que el dueño del 3.30 pudo recuperar los 790 euros que portaba el acusado en el momento de la detención. Sin embargo, el empresario reclama "por el efectivo sustraído, así como por los daños ocasionados en el local, que han sido tasados en la cantidad de 1.476 euros".

Los antecedentes penales que atesora han pesado en la contundencia de la condena impuesta. En 2012, por ejemplo, el Juzgado de lo Penal 5 de Málaga lo sentenció a cumplir cuatro años y medio de prisión por un delito de robo con violencia. En febrero de 2016, otro juzgado malagueño (Penal 9) lo condenó por robo con fuerza a tres años y tres meses de reclusión. Estas dos condenas fueron cumplidas por el encausado en mayo de 2020.

Pero además tiene otra condena pendiente de cumplimiento, dictada por el Penal 2 de Málaga por otro robo con fuerza cometido en 2010 y por el que debía completar otro año entre rejas.

Además de los cuatro años de prisión que tiene que superar por los asaltos de Punta Umbría, el condenado debe indemnizar al propietario del 3.30 con 66 euros de los boletos de lotería no recuperados y con 1.476 euros por los desperfectos ocasionados.

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