Voces de Huelva

Ana Bejarano: "Seguro que vemos una epidemia de pancreatitis por el alcohol en unos años"

Ana Bejarano (segunda por la izquierda), junto a su equipo en el hospital Juan Ramón Jiménez.

Ana Bejarano (segunda por la izquierda), junto a su equipo en el hospital Juan Ramón Jiménez. / M. G.

Las patologías digestivas, de todas las existentes en el mundo, son las más prevalentes. Así lo asegura la jefa del servicio de Aparato Digestivo del hospital Juan Ramón Jiménez, Ana Bejarano, que atisba un problema de concienciación social acerca de las mismas. La alimentación, el alcohol o, incluso, el estrés son factores a tener en cuenta si se quieren prevenir las enfermedades digestivas.

- ¿Cuáles son las patologías digestivas con mayor incidencia?

- Hay que resaltar, primeramente, que el aparato digestivo es muy amplio -va de la boca al ano-, por lo que hay muchas patologías: desde enfermedades sin tanta gravedad como un síndrome intestino irritable hasta las más agresivas, véase aquellas que producen problemas pancreáticos. De hecho, el de páncreas es uno de los cánceres cuya frecuencia más ha aumentado y en la mayoría de las ocasiones no tiene curación porque se identifica en estadios muy avanzados. Igualmente, tienen bastante incidencia las patologías de vesículas biliares, enfermedades del hígado por depósito de grasa asociadas a la obesidad u otros factores cardiovasculares; o las inflamatorias intestinales. Todas las tratamos en el hospital Juan Ramón Jiménez.

- ¿Hemos maltratado a nuestro aparato digestivo con nuestras dietas?

- Las patologías digestivas están muy relacionadas con el cambio de dieta de los últimos años. Hemos pasado de la mediterránea a otra con muchos productos facturados. Todas las dietas pobres en verduras y frutas y muy ricas en carnes y grasas saturadas aumentan la frecuencia del cáncer de colon y de toda patología digestiva en general. De hecho, en nuestra zona tenemos una alta incidencia de pancreatitis y de enfermedades de la vesícula biliar por una alimentación demasiado rica en grasas saturadas.

- Además de la alimentación, ¿qué hay del alcohol? ¿cómo influye?

- La juventud está desatada con el alcohol. Hay poca conciencia social del exceso de alcohol que se consume y en unos años veremos las consecuencias. Seguro que veremos una epidemia de pancreatitis por las bebidas alcohólicas. Y es que hay que recordar que el alcohol es la primera causa de pancreatitis, junto a las piedras en la vesícula, además de tener también un gran efecto en la hepatitis.

- ¿Somos menos santos, entonces?

- Parece que en los últimos cinco años sí que hay gente más concienciada con la alimentación, pero lo cierto es que seguimos viendo en las consultas que la gente se cuida poco en relación con la alimentación y el ritmo de vida. Nos estamos acostumbrando a las comidas preparadas y, por ello, comemos peor que nuestros padres.

- Cuidar la alimentación es muy importante, pero ¿y el estrés?

- El estrés influye mucho en las enfermedades que llamamos funcionales, como las patologías de intestino irritable o la enfermedad inflamatoria intestinal. El ritmo de vida actual influye negativamente en las patologías digestivas y cada vez son más jóvenes los afectados. Tenemos las consultas saturadísimas de pacientes con enfermedades digestivas únicamente por estrés, como gases, diarreas, hinchazón abdominal o estreñimiento.

- ¿Están entonces las enfermedades hepáticas relacionadas también con la alimentación?

- Indiscutiblemente, estamos entrando de lleno en una nueva pandemia, la de la enfermedad hepática por depósito de grasa o hígado graso, en completa relación con una dieta no saludable, rica en grasas saturadas e hidratos de carbono. El cambiar nuestros malos hábitos alimentarios, disminuir la ingesta de alcohol y evitar el sedentarismo nos ayudará a mejorar nuestra salud digestiva, así como la frecuencia de enfermedades cardiovasculares y neoplasias del aparato digestivo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios