Huelva vive el momento "culmen" de su Rocío con el reencuentro entre la Virgen y el Simpecado: "Disfruta, nunca la tuvimos tan cerca"

El Rocío/Las campanas repican en la casa hermandad de Huelva desde las 6:40. No cesarán hasta que los hermanos se aseguren de que la Virgen del Rocío gira la esquina y continúa su recorrido abandonando El Real. A metros de la puerta, donde el Simpecado espera reencontrarse con ella un año más, se sabe que se acerca el momento cuando el espacio se reduce a mínimos y los móviles dejan por un instante de grabar. "Disfruta el momento, nunca hemos tenido a la Virgen tan cerca", susurran algunas de las madres que van con sus hijas.

Es a las 7:26 cuando al fin está frente a frente con el Simpecado, tras horas de espera desde que saltara la reja y empezase la procesión de 2025. El cura que reza la primera salve este año, Ignacio Vírseda Cháves, lo ha vivido desde aún más cerca. "Me ordené hace solo seis meses y ha sido inolvidable este momento. Es de intimidad sobre todo", contaba a este periódico.

Como cada año, las madres "piden protección para los más pequeños", llegando algunos de ellos y de mano en mano hasta las plantas de la Virgen. Las palmas -y una gran petalada- por Huelva no dejaban de resonar, llamando un año más a la Madre del Rocío a acercarse y a alcanzar "el momento cúlmen de la peregrinación".