Emigrantes llena de color las calles de Huelva con sus mejores carros para El Rocío: "Llevamos más de un mes trabajando y ha dado resultado"

Huelva/Familias, peñas, hermanos, amigos. Todos avanzan hasta El Rocío y todos tienen algo en común: devoción por la Virgen y un vínculo que les une a través de la Hermandad de Emigrantes, que salía este mismo miércoles rumbo a la aldea almonteña, contando los minutos para vivir su gran romería. Esta vez, eran más numerosos que nunca e iban bien acompañados. El presidente de la Hermandad, José Francisco Garrido, y la Hermana Mayor, María José Muiño, iban en la cabeza y abriendo camino, acompañados por los cuerpos de seguridad que velaban por un recorrido sin incidentes y de pleno disfrute.

Tras ellos, una gran explosión de colores brotaba de los 72 vehículos -entre los de tracción animal y los de tracción mecánica- y de los rocieros que iban en el interior de cada carro y que cruzaban de punta a punta Huelva capital. Desde el número dos, el carro de la Hermana Mayor, se emocionaban ante la cantidad de gente que acudía y el cariño que trasladaban. "Esperamos que el tiempo acompañe, que parece que sí. Que lleguemos bien a los pies de la Virgen y también que lleguen bien todos sus peregrinos, sin importar de donde vengan. Que no haya ningún tipo de problema, siempre orgullosos y contentos de hacer este nuestro camino hacia El Rocío", contaban a Huelva Información algunos de ellos.

Los más veteranos parecen disfrutarlo más que nunca y prometían no perderse ni un minuto de los preparativos para ir a El Rocío, con todas las ganas y devoción del mundo. Es el caso de Paca Hurtado, que vuelve como cada año a involucrarse con los suyos en las tareas más creativas. "Esto es un trabajazo todos los años. Llevamos por lo menos un mes y medio haciéndolo. Está hecho de papel de seda, para que dé color", contaba desde el interior del carro.

Algunos de ellos van llenos. En el de la 'Peña de los Zumbaitos', Ainoa Montero cuenta que lo componen casi 30 personas, incluyendo a los más pequeños que también se han puesto el traje y no se apartan de la primera fila. Para el resto de la peña, ya es toda una tradición: cada año marchan juntos hasta El Rocío en un carro que se mejora y se rediseña por todos y cada uno de los miembros. También celebran la temperatura, que para salir de Huelva acompaña más de lo que imaginaban. "De momento estamos fresquitos, y que así se quede", dice una de ellas. Sobre los trabajos, cuentan que llevan más de un mes "poniendo papelitos", con un último día, el pasado martes, de remate y de puesta a punto de los detalles finales.

Los deseos son los de siempre. Salud, una romería para el recuerdo, y pasarlo bien en familia. "No deja de dar la alegría de pasar tiempo con los tuyos y disfrutar de la gente, de la música y del paisaje. Esto lleva tiempo prepararlo, pero ha dado sus resultados", dicen desde el interior de otro de los carros que ponen rumbo a la aldea. El desfilar de la caballería y los vehículos impecables son solo la punta del iceberg: El Rocío siempre empieza mucho antes, cuando todos y cada uno de los peregrinos se reúnen para planificar, crear y trabajar en el devenir de su romería.