Vía Augusta
Alberto Grimaldi
La conversión de Pedro
Oculto entre bosques, rocas y el rumor del agua, en medio del Condado de Huelva, se encuentra un paraje que cautiva todos los sentidos: El Chorrito.
Este manantial, ubicado entre Paterna del Campo y la aldea de Tujena, brota cristalino, alimentando el río Corumbel y convirtiéndose en un aliciente para quien busca naturaleza pura y paisajes que curan el alma.
Al recorrer este entorno natural te acompañan zarzas que se entrelazan, helechos vibrantes, rosas silvestres que perfuman la brisa, y especies como encinas, alcornoques y coscojas que dibujan sombra generosa.
El agua del manantial, dicen algunos, posee uno de los sabores más puros de toda la provincia. Muchos llenan sus garrafas, otros solo extienden las manos y beben directo de la fuente.
La ruta circular que abraza El Chorrito se completa en unas dos horas, recorriendo poco más de 8 kilómetros. Es un sendero suave, ideal para familias, pero también permite explorar rincones más vírgenes.
Si prefieres el viento en la cara y darle a los pedales, hay una ruta en bici de algo más de 5 kilómetros desde Tujena hasta El Chorrito. Sal de la aldea por la HU-6108; tras aproximadamente 1,5 km, gira hacia la Vereda de la Aguilosa (carretera local de Berrocal), que te llevará al paraje.
En algunos tramos el camino hunde su huella entre piedras. No es carretera asfaltada, pero ofrece aventura y paisaje.
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