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Puerto Moral fue aldea de Aracena hasta el año 1818, cuando Fernando VII concedió el privilegio de villazgo a la actual localidad, tras un largo y convulso proceso.
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El hito más importante del siglo XX en Puerto Moral fue la construcción de un embalse en su término municipal, que fue inaugurado en julio de 1972 por el ministro de Obras Públicas, Gonzalo Fernández de la Mora.
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La construcción de dicho embalse supuso un aumento demográfico en una época en la que el resto de la comarca vivía un considerable descenso de población.
Puerto moral fue una pedanía de Aracena hasta el año 1818. Año en el que Fernando VII le concedió el título de villa.
La iglesia de San Pedro y San Pablo data de los Siglos XIV-XV. Su parte más antigua, el presbiterio es de estilo gótico.
A pesar de su escasa población, en Puerto Moral viven actualmente 35 niños.
La escuela de Puerto Moral forma parte del programa ADERSA. Este tipo de educación fomenta el conocimiento y el respeto con el entorno.
El pueblo está lleno de carteles con palabras típicas del vocabulario rural andaluz
Por el centro de salud de Puerto Moral pasan al día unas 10 personas. Esto hace que la atención sanitaria sea excelente y prácticamente personalizada
María, Juan y Laura son las tres personas que se encargan de la salud de los vecinos y vecinas de Puerto Moral.
Uno de los mayores atractivos del pueblo son sus molinos de agua, que en época navideña forman parte del escenario del belén viviente
Puerto Moral también cuenta con un parque botánico lleno de plantas autóctonas de la serranía onubense
Desde el pueblo es posible ver el embalse de Aracena. Construido a mediados de los años 70, frenó la despoblación que se cernía sobre Puerto Moral
Desde el pueblo se aprecian una gran cantidad de huertas, que surten al pueblo de productos de la tierra
Muchas de estas huertas están pobladas por animales de granja que son usados para el autoconsumo de los vecinos
La iglesia de Puerto Moral está repleta de numerosos retablos y obras de gran valor artístico y cultural
Con sus 92 años es la persona de mayor edad del pueblo. Recuerda con gran precisión todas las historias de la aldea, incluso el origen del gentilicio "panzurracos". Hace muchos años el agua de la fuente tenía ranas y al beber de este agua los niños se les hinchaba la barriga.
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