La provincia de Huelva se ha convertido en protagonista en la popular revista de viajes Traveler.
"Excepto los sevillanos que abarrotan Punta Umbría en cuanto El Giraldillo comienza a sudar la gota gorda, y los extremeños que sueñan con apartar a jamonazos las alturas de la Sierra para acercarse un poco más al mar, son pocos quienes sitúan Huelva entre los destinos más buscados de Andalucía. Su presente industrial, imponente pero carente de belleza, le acarrea una fama poco amable, y más, si por vecina tienes a Cádiz", destaca.
Pero lejos de centrarse en el lado industrial, desde la revista llaman a apartar la vista de las fábricas, a coger bikini y bañador y a disfrutar de los tesoros ocultos de una tierra plagada de encantos.
Encantos de Huelva que enamoran al visitante
Entre los lugares más destacados de Huelva, Traveler resalta la Plaza de las Monjas, "el lugar perfecto para tomar al pulso a una ciudad fundada por los fenicios cuyas calles conducen, en ligera cuesta abajo, hacia las aguas del río Odiel".
Igualmente, se hace hincapié en la inigualable gastronomía onubense: "no hay quien arrebate su trono a la Cruzcampo, ni a las ensaladillas de pulpo o gambas, ni al serranito, ni a los fritos de todo color y tipo que aportan poderío a la comida del sur", recogen.
Sin dejar pasar las coquinas "acompañadas con salsa de ajo que harán chuparse los dedos incluso a los mejor educados". Para probarlas, recomiendan el Bar Juan José o la terraza de La Teja para acompañar sus coquinas con una ensaladilla de pulpo "que os hará soñar en blanco y verde". Tampoco puede faltar el jamón de Jabugo, necesario para afrontar el paseo hasta la orilla del Odiel, donde se encuentra el puerto de la ciudad.
De los Enebrales a El Rompido
"Punta Umbría es, sin duda, el destino más popular y conocido, y por eso, merece la pena asomarse a otros enclaves", destacan.
Por eso, desde la revista ponen el foco en la playa de Los Enebrales, carente de edificios a pie de playa, oculta tras los pinos y enebros de quienes toma el nombre, o El Rompido, "un coqueto pueblo de pasado y presente pescador donde los ancianos continúan calentando sus huesos a base de braseros. Las casas duermen sobre la arena, frente a la ría que forma el río Piedras, y que forma una enorme lengua de arena que puede alcanzarse en ferry".
Islantilla y Mazagón
En Traveler resaltan la belleza de Islantilla, "frecuentada por caravanistas y nómadas que buscan la sombra de sus pinos para aparcar sus furgonetas, rasguear una guitarra, y posponer su regreso a un norte de Europa que en absoluto echan de menos"; y Mazagón, "una bella excepción en el conjunto de playas onubenses, pues posee unos acantilados que no admiten parangón hasta que llegamos al Algarve portugués".
Y, por su puesto, los atardeceres de Huelva, un leitmotiv del que es difícil desprenderse, pues, dicen desde la revista, esta es una tierra que mira al oeste, como hizo Colón en su día, imaginando América.
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