Sólo Federer es infalible
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Murray cae ante Querrey y Djokovic abandona en su duelo con Berdych
Andy Murray entregó su corona de campeón de Wimbledon, lastrado por problemas físicos, al caer en los cuartos de final ante el estadounidense Sam Querrey por 3-6, 6-4, 6-7 (4), 6-1 y 6-1.
El británico llegó al tercer Grand Slam del año con molestias en la cadera y evidenció grandes dificultades de movilidad en los dos últimos sets. Llegó a perder nueve juegos de forma consecutiva y acabó sucumbiendo tras 2:48 horas de partido en la cancha central del All England Club. Su derrota no fue la única sorpresa del día, ya que después Novak Djokovic, que de levantar el título se hubiese alzado con el número uno del mundo, se retiró por una lesión en el hombro derecho cuando perdía por 7-6 (2) y 2-0 con el checo Tomas Berdych.
Querrey, que alcanza por primera vez en su carrera las semifinales de un grande, eliminó de Wimbledon por segundo año consecutivo al número uno del mundo y vigente campeón, pues en 2016 tumbó en tercera ronda a Djokovic. Número 28 del mundo con 29 años, se convirtió en el primer estadounidense que llega a unas semifinales de Grand Slam desde Andy Roddick en Wimbledon 2009. "Estoy un poco en schock todavía", dijo nada más acabar el partido el norteamericano, que ganó su único título de 2017 venciendo a Rafael Nadal en la final de Acapulco.
Su penúltimo reto antes de la gran final será Marin Cilic, que ácabó con el sueño del luxemburgués Gilles Müller, verdugo del tenista balear, al ganar por por 3-6, 7-6 (6), 7-5, 5-7 y 6-1. El croata, séptimo favorito, llega a la penúltima ronda de Wimbledon también por primera.
Djokovic, triple campeón sobre la hierba de Londres, llegó al duelo con molestias en el hombro de su brazo hábil, el derecho, lo que le impedía realizar con comodidad la mayoría de los golpes. Pese a que no había perdido ningún set en las cuatro primeras rondas del torneo, el serbio ya tuvo que ser atendido por el médico durante su partido del martes de octavos ante el francés Adrian Mannarino. A la hora y tres minutos de partido, cuando ya estaba un break abajo en el segundo parcial, se acercó a la red para comunicar al árbitro y a su rival su abandono. El checo avanzó así por tercera vez en su carrera a las semifinales de Wimbledon (después de 2010 y 2016), en la que se medirá a un Roger Federer que en su partido número 100 en Wimbledon batió al canadiense Milos Raonic por 6-4, 6-2 y 7-6 (4) vengando su derrota del año pasado.
El suizo, que es ya el jugador que más veces ha alcanzado la penúltima ronda del torneo superando a Jimmy Connors (11), volvió a dar una clase magistral en la pista central. No cedió su servicio en ningún momento y dinamitó el duelo con 46 golpes ganadores.
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