El San Roque de Lepe mantiene su buena relación con la Copa Federación. Sin hacer un partido brillante, sino más bien todo lo contrario, el equipo lepero tuvo que esperar hasta la segunda parte de la prórroga para superar al Ciudad de Murcia, equipo de Tercera Federación que supo aguantar con mucho orden en defensa a un rival de superior categoría como el aurinegro.

El equipo entrenado por Juanma Pavón buscaba en esta competición un bálsamo para apaciguar el mal arranque liguero, pero está claro que, a pesar del pase a la siguiente ronda donde espera el Villafranca extremeño, todavía necesita mejorar mucho para ser un equipo fiable.

Como era de esperar, el técnico aurinegro apostó para este partido por un once con muchas novedades, comenzando por la portería donde Raúl disfrutó de sus primeros minutos en competición oficial desde que llegó al club lepero. En la defensa, el único titular fijo hasta el momento en Liga era Jesús Rueda, acompañado en esta ocasión por Diaby y Carlos Becken para formar el trío de centrales, y con Lamin Fatty y Fran Ávila en los carriles. En el centro del campo Fran López salía por primera vez de inicio tras disputar el pasado fin de semana sus primeros minutos de la temporada, después de recuperarse de los problemas físicos que le habían impedido debutar hasta ahora. Junto a él estaba Camacho, este sí titular indiscutible, y por delante, con mucha movilidad y permutas en sus posiciones, estuvieron Víctor Barroso, Abreu y Juanito, este en su primera titularidad.

Poco juego tuvo la primera mitad, a pesar de los intentos del San Roque por llevar el control del choque ante un Ciudad de Murcia que esperaba atrás con mucho orden. El aurinegro Abreu fue el primero en buscar la portería contraria en una acción individual en el minuto 12 que acabó con un disparo por encima del larguero. Poco después era Fran Ávila el que lo intentaba con una volea cruzada con escasa puntería. El primer remate del conjunto murciano se hizo esperar hasta el minuto 20 con un disparo lejano de Marcos que salió por encima de la portería local.

La primera ocasión en la que el gol estuvo cerca tuvo lugar en el 26 con un lanzamiento de falta lateral ejecutado por Juanito con mucha intención, quedando el balón suelto dentro del área murciana sin que ningún atacante acertase a meter el pie.

En el tramo final de la primera mitad Víctor Barroso y Abreu buscaron la portería de Íker Checa desde el borde del área, encontrándose el primero con el portero y el segundo con el palo. Fue la ocasión más clara de la primera mitad y todavía se estará preguntando los asistentes al Ciudad de Lepe cómo no acabó en gol tras pasearse el balón por la línea de meta.

En el comienzo de la segunda mitad, tras un par de tímidos disparos de los locales Diaby y Lamin Fatty que acabaron en nada, llegó el primer susto serio para la afición lepera. Un córner botado desde la izquierda del ataque murciano lo remató de cabeza David Vera adelantándose a la defensa y obligando a Raúl a hacer una gran parada para evitar el gol, cayendo el balón a pies de Pablo Serrano que remató contra el poste.

El técnico aurinegro reaccionó a esta clara ocasión introduciendo más potencial ofensivo con la entrada de Jacobo y Mizzian. Los cambios le dieron al San Roque más presencia en ataque y ahora sí obligó a Íker Checa a tener que intervenir para mantener su portería imbatida en dos remates a bocajarro casi consecutivos de Abreu y Mizzian.

Fueron solo acciones aisladas porque el Ciudad de Murcia seguía defendiéndose con orden ante la escasez de ideas ofensivas del San Roque. Hubo que esperar hasta el minuto 78 para ver una nueva ocasión del ataque local en una jugada en la que Mizzian presionó y robó el balón a la defensa murciana y Jacobo remató saliendo el balón cerca de la escuadra. El propio Mizzian tuvo la ocasión en el 92 de evitar la prórroga, pero su remate a un buen centro de Lamin Fatty no encontró puerta por centímetros.

Más por cansancio del rival que por juego propio, el San Roque tuvo más presencia en campo contrario en la primera parte de la prórroga, pero la claridad en ataque seguía faltando en las filas aurinegras. Un remate de Diaby que atrapó con seguridad Íker Checa fue la única ocasión para abrir el marcador en los primeros 15 minutos del tiempo extra.

Tuvo que ser a balón parado de la única forma que el San Roque de Lepe podía marcar. Una falta al borde del área murciana al comienzo de la segunda mitad de la prórroga le dio a Sergio García la oportunidad que su equipo había estado esperando todo el partido. El carrilero aurinegro aprovechó la ocasión y con un disparo que superó la barrera y se envenenó tras botar en el césped sirvió para abrir marcador después de 106 minutos de partido.

Todavía hubo tiempo para un susto de última hora con el remate del visitante Yordi a la parte exterior del poste de la portería de Raúl en el minuto 115.