Fútbol

La Quiniela no la inventó Franco

  • Lo hizo el industrial santanderino Manuel González Lavín, que la puso en marcha en la Liga 1930-31

Comparativa de la venta de la Quiniela en los últimos 16 años.

Comparativa de la venta de la Quiniela en los últimos 16 años. / H, Información

El periodista deportivo Juan José Morón, autor del libro Expediente 1X2, está convencido de que los ingleses ya apostaban por los resultados de los primeros partidos que se disputaron en Ríotinto y Huelva. Sin embargo, en la presentación de su informe/estudio sobre las Quinielas en España, se lamentó de no haber encontrado ni un solo documento que lo certifique. En cambio, sí tiene en su poder los documentos que cambia radicalmente la versión oficial de la historia de la quiniela.

No la inventó Franco, y lo que la SELAE (Loterías y Apuestas del Estado) viene celebrando son los 75 años de la Quiniela franquista. En el Club Inglés Bella Vista (Ríotinto), al que Juan José Morón volvió el pasado viernes tras haber sido parte principal en la organización de los actos de la Cuna del Fútbol, entre 2002 y 2005, presentó las investigaciones sobre la histórica quiniela desde que un industrial de Santander, Manuel González Lavín, la inventó y la puso en marcha durante la competición 1930 -1931, con la II República española. Incluso el nombre de Quiniela lo utilizaba porque se refería a una competición reglada de 5 partidos protagonizados por 10 equipos, que eran los que conformaban aquella Liga. Y lo que había que acertar eran los resultados, como ocurrió cuando Franco copió el método y los reglamentos que ya tenía la quiniela santanderina. Todo documentado, lo que supone un revolcón en la oficialidad de la SELAE.

Juan José Morón nació con las quinielas, ya que su padre poseía varios despachos en Sevilla, cuando estas tenían un enorme arrastre social y los nuevos millonarios aparecían en las primeras páginas de los periódicos y estaban en la boca de todos. A su padre, lo apodaron en los años sesenta Juan Quinielas, por gestionar varios despachos y por crear la Liga de Peñas nacional, y Juan José Morón, cuando aún no había alcanzado la primera década de vida, recuerda de cuando lo acompañó a la central del Banco de España, en Sevilla, (el banco de los bancos) y vio cómo el afortunado quinielista de la jornada recogía su premio (63 millones de pesetas de la época) en grandes fajos de billetes. Expediente 1X2, no es más que el reflejo de toda una vida dedicada a analizar y conocer los entresijos el mundo de las Quinielas. ¿Quién va a inspeccionar a Hacienda?, nadie, pregunta y contesta Morón, de ahí las numerosas irregularidades de este juego de apuestas.

Por eso no duda en señalar chanchullos, fraudes, amaños, picaresca y dinastías que por favores o intereses políticos se van sucediendo en el control de las delegaciones provinciales. Intereses que van desde los altos sueldos y comisiones hasta el dinero que cada año desaparece ante los tapados ojos de Hacienda. Para demostrarlo su libro presenta más de 4.000 documentos y fotografías. Un producto único al que se está dejando morir porque hoy hay en juego otros intereses y tendencia por fomentar el juego pasivo. De hecho, en el Club inglés Bella Vista acusó a los Ministerios de Hacienda y al de Consumo de mirar para otro lado ante las irregularidades, especialmente en lo que se refiere a hacer cumplir la legislación actual.

Juan José Morón, durante su visita al Club Inglés de Bella Vista. Juan José Morón, durante su visita al Club Inglés de Bella Vista.

Juan José Morón, durante su visita al Club Inglés de Bella Vista. / H, Información

Un estudio oficial del ICEX sostiene que los jóvenes de 14 a 18 años, por tanto, menores de edad, son los que tienen una afición más acentuada a apostar en las Quinielas y sin embargo, no hay control sobre las restricciones para que los jóvenes apuesten, nadie les pide el carnet, ni para que un ludópata registrado entre en un despacho de quinielas y haga libremente sus apuestas, cuando está expresamente prohibido. Tampoco hay transparencia en el destino de los importes de los premios que no se recogen ni cobran. ”Es, dice Morón, un maná de dinero fuera de control y un instrumento anónimo para blanquear dinero”.

De ahí que sostenga que es la perla dorada de los políticos. Forma parte de las puertas giratorias del sistema para colocar a amigos o a parientes. En realidad, como aseguró “son zorras controlando a las gallinas”. Ni Hacienda ni Consumo realizan un control efectivo sobre el SELAE, “o se cambia la Ley o lo que pasa no es normal, en un organismo que mueve más dinero que el de cuatro Ministerios juntos”. En su opinión, para el Estado “es un negocio” en el que fallan los controles de un instrumento político cuya transparencia brilla por su ausencia. La Quiniela, para poder entrar en la Unión Europea, pagó toda la deuda del fútbol y, aun más, toda la del deporte español. Hoy los clubes de fútbol no están tan interesados en las Quinielas, porque ingresan más por derechos de televisión, pero antaño se volcaron en pedir más y más dinero para sanear sus propias cuentas ante los derroches que se habían producido.

De recaudar doce millones de euros por jornada actualmente apenas se llega a dos millones de euros. “Se la han cargado, aunque puede reactivare adaptándola a las nuevas tecnologías y haciendo más atractivos los premios”. Los despachos de Quinielas son una de las mayores franquicias del mundo. Puso como ejemplo al Reino Unido, donde existen oficialmente 8.320 casas de apuestas, cuando en España hay 10.500 despachos donde Loterías y Apuestas del Estado venden sus productos, pero sorprendentemente no están consideradas como casas de apuestas, aun teniendo las Quinielas carácter de apuestas.

Rafael Cortes, reconocido documentalista de la historia del fútbol en Ríotinto, agradeció a Morón esta visita, y recordó todo lo que hizo para que oficialmente se reconociera a Minas de Ríotinto como cuna del fútbol en España, cosa que ocurrió 130 años después de que apareciese el fútbol en nuestra provincia.

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