Táctica y estrategia. Al margen del significado poético que les dio Mario Benedetti, el dominio de ambos conceptos resume la derrota que encajó ayer el Recre frente al Dépor. El líder gobernó el primero, pero erró en el control del segundo, que bastó a un rácano rival para llevarse los tres puntos. Un excesivo botín a tenor de los méritos contraídos por uno y otro equipo, pero que deja al descubierto unas de los principales defectos del Decano: las jugadas de estrategia. La fecundidad que hasta ahora había hallado el Recre en este tipo de jugadas en el área rival, origen de casi un tercio de sus goles, había tapado una carencia que se ha desnudado en las tres últimas jornadas. No en vano, los cinco últimos goles que ha encajado el Recre, uno ante el Mallorca, tres en Ponferrada y el de ayer frente al Dépor, llegaron en jugadas a balón parado, un lunar al que el equipo ha de poner remedio si no quiere comprometer el colchón de puntos que se labró en un arranque de temporada inmaculado. Porque sólo en ese recurso fue ayer inferior el Recre al Dépor, que, si bien es cierto que con mucho oficio y músculo, se limitó a abrigar a Lux y a aguardar a algún error rival. Una estrategia que, aun simple, le salió a la perfección a Fernando Vázquez pese a que Sergi, muy limitado de recursos ofensivos, tácticamente volvió a ganar la partida desde la pizarra.

Defensa

Llueve sobre mojado. El Recre volvió a sufrir a balón parado. Una carencia que no es nueva pero que se ha agudizado en las últimas jornadas, en las que sus rivales parecen haber encontrado un filón. Con el balón en movimiento el equipo ha corregido las lagunas y espacios que solía dejar entre líneas, pero parece haber descuidado el control de la única variable que, a día de hoy, parece capaz de hacer daño al Recre. Y duele más cuando se está sobre aviso porque el gol de Insúa se veía venir. El Dépor calcó con anterioridad dos saques de esquina hasta que encontró premio a su insistencia en el tercero.

Ataque

Si bien es cierto que, condicionado por las bajas de sus hombres más determinantes y la consistencia del rival, el equipo no mostró la clarividencia ofensiva de otros partidos, sí dispuso de un par de claras ocasiones con las que hacerse acreedor al menos a un empate. Sin Álvaro Antón en el campo, el líder pierde gran parte de su potencial a balón parado.

Virtudes

Pese a las limitaciones de una plantilla corta y las bajas que imponen las sanciones y lesiones, Sergi ha conseguido armar un equipo competitivo que, pese a no disponer de algunos de sus principales recursos ofensivos, volvió a ser competitivo frente a otros de los candidatos al ascenso.

Talón de aquiles

Este Recre sobrevive a sus carencias defensivas gracias a la pólvora que tiene arriba, por lo que, a la espera de recuperar a algunos de sus principales recursos ofensivos (Jonathan Valle, Arana y Jonathan Valle), debe extremar aún más las precauciones. Lo que sigue siendo una virtud, las jugadas a balón parado, no debe convertirse también en un defecto, aunque sea el único que encuentren los rivales para hacer daño.