El Ciudad de Huelva cerró su participación en la fase final por el ascenso a la LEB Plata con una nueva derrota, en esta ocasión ante el Estudiantes, por 66-90 en un partido en el que siempre fue a remolque en el marcador. El dominio bajo los tableros (32-50 en rebotes) y la mayor intensidad de los jóvenes colegiales, claves del choque.

El conjunto onubense, cuyas opciones de clasificarse segundo (daría una opción más de luchar por el salto de categoría) eran mínimas tras caer ante Cartagena y Llucmajor, dio la cara, pero apenas tuvo opciones reales ante la juventud del conjunto madrileño. Los onubenses se despiden de Valencia sin lograr la victoria, pero dando siempre la cara, cerrando una temporada histórica para un recién ascendido aunque no le pudiese poner la guinda.

El partido tuvo poca historia; el Estudiantes puso pronto tierra de por medio en el marcador (9-24 al final del primer cuarto); mejoraron los pupilos de Pedro Vadillo en el segundo, llegándose al descanso con 26-39. Los onubenses tenían poco acierto en el tiro (4/18 de dos y 4/15 de tres) ante un rival acertado en la larga distancia (6/12) y que además dominaba el rebote con claridad (17-26).

En la continuación el Ciudad de Huelva tuvo momentos buenos, recuperó en parte sus señas de identidad, y el acierto en los triples le permitió recortar distancias (46-54), entrando en los últimos diez minutos con opciones de victoria (52-62).

En el último cuarto los madrileños pusieron una marcha más ante un Ciudad de Huelva cansado (54-70). Con el partido roto y sentenciado la ventaja se elevó hasta el 66-90 definitivo.

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