Reposaba Jonás un poco colocado por los efluvios estomacales del monstruo marino y no veía dónde estaba, ¡cuidado!, le advirtieron, pero decía Jonás: "¡Qué ciego tengo! ¡No veo ná!", mas dentro de una ballena. Al PSOE le está pasando lo mismo con ese PP tan hobbesiano, este monstruo estatal, el Leviatán solipsista que deglute todo sin parar...

Lamento decirlo pero el socialismo oficialista (y montaraz, que pregunten a Borrell, o por aquí a Parralo y a tantos) ha perdido el Norte... Bueno, lo que ha perdido es la izquierda. Quedan los profesionales de la estrategia que, amparados por militantes con estómagos de hierro, se mantienen veinticuatro horas al día inventando que gobiernan, alucinando con sus pseudoprogresías, dedicación exclusiva para el vacío sin ideas. Ahí tenemos a Susana Díaz actuando de facto como máxima dirigente del partido (sin haber ganado unas elecciones, recordemos que aquí gobiernan con la derecha de Ciudadanos) porque no hay campaña electoral mejor que aparecer ya en tu sitio; no importa lo real sino la imagen que queda, fíjense que los relevos en la Presidencia de la Junta se producen siempre a mitad del mandato, para que durante dos años paguemos la perfecta campaña propagandística a quien terminará presentándose. Usan lo público como papel de excusado; publicidad institucional que en realidad es del partido que gobierna: ¿no es eso un delito? Anímese, Fiscalía...

Gozo con que una parte del partido en Huelva se postule por el Congreso Extraordinario y las Primarias, me encantaría leer una buena entrevista en este periódico con alguno, alguna de ellos, porque eso ayudaría a entender la realidad de este PSOE fagocitado por el PP. Pero no van a salir en ningún sitio, el Aparato vela por nuestra seguridad y ha decidido compartir responsabilidades (con la derecha que nos ha traído hasta aquí), atender a las protestas (como ésta de sanidad en las que nos han llamado tontos y peperos), todo para reconducir a los peligrosos radicales antisistema (esa gentuza que no es de orden, como manda el Dios).

La chundarata dentro del partido es evidente, porque habrá gente de izquierdas, digo yo, todavía socialista. Esto tan progresista de abstenerse en todo incluidos los presupuestos, de pactar reformas que no tienen calado económico como educación (porque los negocios no se tocan), todo esto no es más que tinta calamarera para ocultar el pacto tácito entre quienes reparten bacalao para no perder pesca: el bipartidismo.

Niegan lo evidente. Han perdido. Son pasado. Sólo quienes tienen una mínima formación política y consciencia ideológica dentro, se dan cuenta de la ruina a la que están llegando, devorados por la ballena no se dan cuenta de la realidad: el bipartidismo volverá, sí, pero ellos estarán del lado del PP, hasta los sindicatos (¿viven?) anuncian movilizaciones contra lo que el PSOE apoya con el PP, ¿de verdad no ven dónde se han situado? Hay mucho votante que sí, engañen a otros.