Pese a los mensajes catastrofistas que con tanta asiduidad escuchamos, hay razones para ser optimistas en lo que respecta al cuidado del medio ambiente. Dentro de este ámbito, la Universidad de Huelva (UHU) ha sido galardonada con el III Premio Mejores Prácticas Ambientales que ha concedido la Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas (Asefma).

En resumen, el reconocimiento valora el trabajo realizado por los científicos de la UHU en el uso de los plásticos agrícolas para la mejora de las condiciones del asfalto y su duración.

El responsable del proyecto en la UHU es Pedro Partal, del Departamento de Ingeniería Química, Química Física y Ciencias de los Materiales. Con la Universidad de Huelva han colaborado la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía y la empresa Eiffage Infraestructuras, una multinacional francesa y uno de los grandes en el mundo del asfalto. El proyecto lleva por enunciado Reutilización de residuos plásticos agrícolas en la fabricación de mezclas bituminosas para uso en carreteras siguiendo la tecnología por vía seca. El nombre de mercado es Plastic Road.

Partal explicó que "el punto culminante del proyecto tuvo lugar en 2014 cuando el asfalto tratado con plásticos agrícolas, se extendió en una carretera abierta al tránsito". Fue en concreto en la A-2005 en uno de los accesos a Jerez de la Frontera. En ese tramo se extendió una capa de asfalto tratada con polímeros (plásticos) y otro, con el asfalto tradicional. El firme en aquel lugar presentaba un serio deterioro evidenciado por grandes fisuras. Tras su aplicación en la A-2005, se están estudiando los resultados que dan estas dos opciones y Partal confía en que el proyecto pueda seguir adelante.

Son dos las ventajas que el tratamiento del asfalto -betún- con plásticos agrícolas ofrece: los beneficios medioambientales y los económicos. Las ventajas que puede tener en el medio ambiente son todo menos desdeñables. El profesor de la Universidad de Huelva explicó que "no tenemos en Andalucía una salida realmente satisfactoria para todos los excedentes a los que hay que enfrentarse de plásticos agrícolas", por lo que su aplicación en el asfalto es un recurso de suma importancia. Hay otra ventaja: "los plásticos agrícolas para uso de asfalto de carretera pueden tener una gran y buen uso ya que no importa que estén sucios a la hora de realizarles el tratamiento". Eso es, por ejemplo, lo que pasa con el plástico usado en la agricultura onubense que viene muy sucio, lo que sería un gran problema para su reutilización pero, sin embargo, no lo es en su aplicación a los betunes.

La otra gran ventaja de este tipo de asfalto es la económica aunque quizá esto haya que verlo con una mayor proyección en el tiempo. En un principio, la viabilidad económica "no es tan fácil de determinarla ya que depende de qué precio tienen, en un momento concreto, el petróleo y los plásticos". No obstante sí merece la pena en un plazo más largo de tiempo. La razón hay que encontrarla en que los asfaltos tratados con plásticos agrícolas preservan mejor la capa de betún con lo que a ésta se le asegura una mayor duración. Es ahí donde se encuentra la rentabilidad. Partal fue categórico al decir que "con este proyecto hemos demostrado que los plásticos reciclados dan, como resultado, una mejor carretera que necesita menor número de reparaciones".

Plastic Road no es un proyecto advenedizo. Pedro Partal viene trabajando en ello desde 1995. Aunque son muchos los colaboradores que han trabajado durante este tiempo en hacerlo realidad, el profesor de la Onubense no quiso olvidar a los integrantes de su grupo de desarrollo en la Universidad de Huelva: José Enrique Martín, Moisés García, Francisco Navarro, Francisco Martínez e Inmaculada Martínez.

Se confía en que el proyecto siga adelante y voluntad no falta para ello. Las empresas están muy concienciadas con el reciclado. El futuro debe seguir por esta aplicación de los polímeros -moléculas que forman el plástico- en el asfalto y avanzar en el ámbito de saber cuáles son las técnicas más adecuadas para incorporar los plásticos a la masa de asfalto.

Los principales trabajos realizados por el grupo de investigación de Ingeniería de Fluidos Complejos CFLab-TEP185, que es el que ha trabajado en la UHU en este ámbito de los polímeros aplicados al asfalto, se adentran en la búsqueda experimental de relaciones entre microestructuras, reología y procesado de materiales reológicamente complejos: asfaltos, dispersiones alimenticias, gasas lubricantes, detergentes, etcétera. Cuenta con numeroso equipamiento capaz de realizar gran variedad de ensayos reológicos a un amplio espectro de materiales así como diferentes plantas piloto para el procesado de materiales (asfaltos, grasas lubricantes, emulsiones, etcétera) y para la optimización del procesado de estos materiales.

Por lo que respecta al premio conseguido por la UHU, que ha compartido con el Ayuntamiento de Madrid, el comité técnico de Asefma seleccionó las mejores prácticas en materia de innovación y sostenibilidad medioambiental. La selección se llevó a cabo atendiendo a los criterios de originalidad, innovación, repercusión en el sector del asfalto y mejoras ambientales evaluadas.