La UD Aracena ganó ayer su partido en casa frente al Bollullos por un ajustado, luchado y sufrido 3-2. Un partido que tuvo dos partes muy diferentes, ya que en la primera apenas hubo ocasiones y el Bollullos se sintió muy cómodo frente a la segunda, en la que sí hubo ocasiones, tensión, emoción, goles y más diversión.

El Aracena gana y se aferra a la esperanza de la salvación, difícil, pero posible con tantos partidos aún por disputar, en el partido en Aracena donde el público vio más goles, cinco en total. Aún así hay que reseñar la escasa presencia de público local en el campo de fútbol, y contando con una digna y animada presencia visitante.

El Aracena estuvo siempre por detrás en el marcador, salvo en el tercero y definitivo, y supo aguantar el resultado. Tuvo alguna ocasión para sentenciar, pero también el Bollullos para empatar. Además, el conjunto local jugó los últimos minutos con un jugador menos tras la expulsión de Daniel. Sufrió y ganó, y nada más, en un partido donde el mejor del encuentro fue el veterano José María, ofreciendo un recital futbolístico con gol, pases, movimientos, y hasta defender al final, aunque ya sin mucho fuelle.

En la primera parte poco que destacar. En el minuto 9, penalti a favor del Bollullos y Sergio adelanta a su equipo. El Aracena apenas llegó a la portería rival y creó poco peligro. Los visitantes no contaron tampoco con muchas llegadas, pero sí tenían el dominio del juego y se sentían cómodos.

Tras el descanso el Aracena empató rápidamente con un golazo de José María en el 49 dentro del área grande. Poco después, en un clamoroso fallo defensivo local, donde el portero quizás pudo hacer algo más, el jugador del Condado, Iván, remató de cabeza solo en el 60' y sin tener que saltar para hacer el 1-2. Jarro de agua fría para la parroquia cebollera, desesperación de Cano desde el banquillo y tensión entre los jugadores. Sin embargo, se vinieron arriba y siguieron creando ocasiones. Pocos minutos después, en el 64, en otro fallo defensivo, pero en este caso del Bollullos, Sergio Fernández se encontró el balón y ponía el 2-2. Los visitantes protestaron mucho al asistente.

Y el tercero y definitivo lo hizo Francisco en el 67, recién salido al campo, y ante la salida del portero tras un pase preciso de José María. El Bollullos disparó hasta el pitido final cuatro a veces entre los tres palos y en todas ellas intervino muy bien el portero serrano. Varias jugadas a balón parado para el Bollullos llevaron el susto a la afición local. El Aracena contó con una falta directa lanzada por Sergio y, antes de la expulsión de Daniel, con alguna contra muy clara, siendo la mejor una en la que el centro de un jugador local no encontró rematador.