Provincia

Higuera vuelve a cautivar miradas con sus figurantes a pesar de la lluvia

  • Linares se convirtió en un Belén gracias a la colaboración vecinal · En Aracena descargó un chaparrón durante el desfile

Contra viento y marea sale la noche del 5 de enero la famosa y casi centenaria cabalgata viviente de Higuera de la Sierra, que este año cumple su 93 aniversario, lo que hace de ella la más antigua de España. Anoche sus protagonistas, casi un centenar de vecinos, aguantaron estoicamente la lluvia que comenzó menuda al inicio del desfile y fue aumentando en intensidad a lo largo del recorrido, que siguió adelante. Una comitiva de 17 carrozas desfiló por las calles del pequeño municipio serrano, representando pasajes de la biblia. La inmovilidad de los figurantes es la nota destacada de esta cabalgata que es una de las más famosas y llamativas de la provincia de Huelva.

También el pueblo de Linares de la Sierra volvió a demostrar ayer el porqué lo conocen como el Belén de la Sierra. Toda la tarde-noche de ayer se pudieron disfrutar las preciosas y cuidadas escenas colocadas a lo largo de un recorrido cada año itinerante y diferente por calles y rincones del municipio. Todo ello para el deleite de los numerosos turistas presentes en Linares, tanto de pueblos cercanos como personas de fuera que decidieron pasar unos días en la comarca. La presencia de famosos como los diseñadores Victorio y Luchino que son habituales a la cita con Linares. Gran parte de los vecinos de este pequeño pueblo colaboran de una u otra forma con la cabalgata, ya que los personajes de las escenas son ellos mismos, bajo la directriz de las encargadas de la organización como miembros de la Asociación cultural Sierra de Picachanes. Sin olvidar la ayuda encomiable de quienes ceden sus cuadras, cocheras, patios, entradas y zaguanes para la ubicación de las escenas.

Una vez más, dentro de los problemas de la cabalgata está la escasez de aparcamientos en zonas próximas al pueblo. Un evento de este calibre debería servir para un mayor apoyo municipal tras el duro esfuerzo durante los últimos meses. Aunque las fuerzas y efectivos de la Guardia Civil sí estuvieron presentes ayer para poner orden. De hecho todos los vehículos entraron por el conocido como el segundo cruce de Linares para salir por el primero en dirección hacia Aracena.

Ya por la noche tras el fin de las escenas, sobre las 20:00 los Reyes Magos desde la plaza de la Fuente saludaron a los presentes. Posteriormente, entregaron los regalos en la iglesia parroquial San Juan Bautista a los niños allí presentes con la actuación del Coro Ecos de la Sierra del propio pueblo. Finalmente, los Reyes visitaron a las personas mayores del conocido como Belén de la Sierra.

La Cabalgata de Reyes Magos de Aracena lució ayer una vez más con 15 carrozas por sus calles, haciendo llegar la ilusión a todos los niños y personas presentes a lo largo del recorrido. Pese a todo, el agua quiso hacer acto de presencia desde el principio. En la primera vuelta con una fina llovizna y desde el primer paso por el Paseo cayó un fuerte chaparrón que deslució ya el cortejo, que tuvo que aligerar el paso. Siguió el recorrido habitual, pero ya no era lo mismo e incluso las carrozas aligeraron un poco el paso para finalizar cuanto antes ante otra posible caída de lluvia. La cabalgata contó con la Banda municipal de música y la Banda de cornetas y tambores, ambas de Aracena.

Como es habitual hubo gran presencia de público en las calles de la ciudad con paraguas en mano y sonrisa en las caras. Pasará también a la historia por ser la primera cabalgata sin el querido y recordado Felipe Guerra Vázquez el Zorro, anterior presidente de la asociación y alma mater de la misma durante décadas hasta su fallecimiento el pasado año.

Sobre las 20:00 salió la comitiva desde la Plaza de San Pedro, subiendo por la avenida de Huelva en dirección al centro. Justo a las puertas del Teatro Sierra de Aracena giró hacia la calle Juan del Cid y avanzar por la céntrica Gran Vía. Llegando a la Plaza Marqués de Aracena, conocida como el Paseo, siguieron el recorrido por la esquina de El Carmen.

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