La asociación cultural Lieva, con sede en Galaroza y el objetivo de difundir el patrimonio, tradiciones, cultura e historia de la comarca, ha presentado el tercer número de la revista Rumor de Aguas, bajo el nombre La última loba de la Sierra, por un estudio del biólogo y socio de Lieva, Iván Carrillo. La revista recoge fotografías históricas y hasta ahora desconocidas de la última cacería, de la que se tiene constancia, de lobos en la Sierra, ocurrida en el mes de octubre de 1975. Cuenta cómo se desarrolló esta cacería de lobos en la comarca, un animal presente históricamente en Sierra Morena y establecido hasta hace años en la zona norte de la provincia de Huelva.

En el acto de presentación celebrado en el Cabildo Viejo, sede del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, en la plaza alta aracenense, estuvieron presentes el delegado de Medio Ambiente de la Junta en Huelva, Juan Manuel López, el director conservador del espacio natural, Antonio José López, y el presidente de la Asociación Cultural Lieva, Antonio Tristancho.

El lobo, que ha desaparecido de la Sierra onubense, fue perseguido históricamente debido a su imagen hostil por ganaderos y propietarios de las fincas cinegéticas. A principios del siglo XX el lobo era un animal muy presente, y ahora mismo tan sólo quedan algunos reductos andaluces; en las Sierras de Andujar-Despeñaperros en Jaén, en Cardeña-Montoro de Córdoba, en las sierras de Villaviciosa de Córdoba en el Parque Natural de Hornachuelos y en la parte más oriental del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla. La situación se debe a que el lobo ha estado siempre perseguido hasta el exterminio casi total en la comunidad autónoma andaluza. Sin duda alguna el ser humano ha sido su gran enemigo y mayor perseguidor.

Por supuesto los nuevos usos del suelo y el aumento de las cabañas ganaderas ha provocado que los terrenos dejaran de ser forestales para ser estrictamente ganaderos. De ahí que el lobo se cobijara en las fincas más dedicadas a la práctica cinegética, pero sus seguridad no estaba asegurada debido al cerramiento de muchas fincas a cargo de sus propietarios, quienes hacían uso de cepos, lazos o prácticas menos adecuadas como el veneno sembrado por todos lados.

En la Sierra y sus alrededores el lobo desapareció a finales de los años setenta. En total 28 lobos abatidos desde 1951 a 1984 en las comarcas serranas de Huelva, Badajoz y Sevilla. El último ejemplar abatido en solitario fue en la finca de La Pata del Caballo en 1985. En cuanto a nuestro entorno ocurrió el mismo año en Escacena del Campo. Y finalmente el 16 de octubre de 1975 la última loba de la Sierra fue abatida en la finca serrana los Caravales.

Juan Manuel López ha señalado la buena labor de Lieva por "abordar temas de la comarca y alienta a los miembros de la asociación para que continúen indagando" en temáticas históricas de la Sierra. Incluso con la posibilidad de una mayor difusión del Parque Natural a serranos y turistas.

El director Antonio José López ha mostrado su satisfacción por "colaborar en una revista de la comarca que difunde los principios del Parque" e incluso en esta tercera edición ha colaborado la entidad medioambiental con la colocación corporativa de la recién aprobada por segunda vez Carta Europea de Turismo Sostenible.

Antonio Tristancho explicó el contenido y bagaje de Rumor de Aguas dedicada casi siempre de forma monográfica a alguna cuestión desconocida, olvidada o interesante para la Sierra.