El número de temporeras marroquíes que viajaron a España para participar en la campaña de la fresa de este año alcanzó las 5.450, por encima de las previsiones, pero supone un descenso de más del 50 por ciento en comparación con 2009. Según publicó ayer el diario L'Economiste, la agencia marroquí de empleo (Anapec) había previsto que las temporeras fueran alrededor de 3.000, pero finalmente se ha podido elevar la cifra de trabajadoras para recoger la fresa en Huelva, todas ellas ya con experiencia de años pasados.

Las 5.450 marroquíes de esta campaña quedan lejos de los 11.500 puestos de trabajo que se cubrieron el año pasado y de los 13.600 de 2008, algo que la Anapec ha atribuido, principalmente, a la crisis económica que vive España en sectores como la construcción o el turismo, lo que ha derivado a muchas personas al sector agrícola. Según señaló el rotativo, las condiciones climatológicas también han afectado a la recogida de la fresa y al número de personas empleadas este año.

Las temporeras marroquíes que viajan a España, a menudo procedentes de las aldeas más remotas del país magrebí, deben todas tener algún hijo y, normalmente, la Anapec suele procurar que no tengan familiares en España, para garantizar su retorno.

Mientras, el alcalde de Lepe, Manuel Andrés González (PP), reclamó la ayuda de la Junta de Andalucía para terminar el albergue para inmigrantes, que se comenzó a construir en 2008, y ha asegurado que el Ayuntamiento es incapaz de terminar la obra y organizar su gestión posterior. El alcalde asegura que "bastante ha hecho ya el Ayuntamiento" y ya no tiene más capacidad.