Una nueva ola de robos está asolando lo poco que queda de patrimonio cultural de la antigua línea del ferrocarril de Riotinto. En apenas cuarenta y ocho horas se han producido dos intentos de expolio de material ferroviario de gran interés cultural y económico en la estación de Las Cañas de Berrocal y otro robo más, y van... en el puente de Manantiales. Como si de una cuenta atrás se tratara, la línea férrea de Riotinto ha perdido ya nada menos que veinte kilómetros de trazado.

El asunto es de tal calibre que ya existe hasta material fotográfico que en vivo y en directo da fe de los robos que se producen.

El último intento reproduce paso a paso la llegada de varios vehículos en la zona del Filón Sur de Riotinto dispuestos a saquear la zona denominada como Almacén Mina, ubicada detrás de las escombreras. El robo de material ferroviario se produjo finalmente con total libertad en una zona que se encuentra dentro del denominado Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de Sitio Histórico, en concreto en la zona de Riotinto-Nerva.

Los postes elegidos ese día para el expolio servían al ferrocarril.

Una vez consumada la 'tala' de las dos grandes estructuras de hierro el plan prosiguió con otro nuevo elemento, el 'pórtico de señales' que se encuentra justo al lado.

Temiéndose lo peor, la Asociación de Amigos del Ferrocarril solicitó trasladar a las instalaciones del Museo de Ferrocarril de Nerva el valioso 'pórtico de señales'. Este elemento histórico casi único en su categoría es muy característico de la zona y tiene un gran valor económico, histórico e industrial, incluso necesita la autorización de la Delegación de Cultura para su cambio de ubicación ya que este elemento posee una ficha específica que enfatiza su protección.

Una vez más la previsión de robo se iba a cumplir. Y el miércoles 15 de abril un vehículo se acercó a la zona. El operativo de alerta se puso en marcha y avisaron a la Guardia Civil y a un representante de la empresa Rumbo 5.0, al parecer titular de los terrenos de esta zona de Filón Sur.

Al llegar al lugar todo estaba en marcha: los dos vehículos aparcados junto al valioso 'pórtico de señales', una especie de 'pórtico de la gloria' para los amantes de la historia del tren, y dos individuos desmantelando el bien de interés.

En ese momento, según la fuente que ha facilitado el relato de los hechos, llegaron los agentes de la Guardia Civil y procedieron a identificar a los individuos y a inmovilizar el vehículo, ya cargado con parte de los elementos cortados. Un representante de Rumbo 5.0 se acercó al lugar del expolio y acompañó a la Guardia Civil.

Una vez más, tal y como pasó anteriormente en el puente de Manantiales, la maquinaria del expolio continúa incansable el desmantelamiento de una de las líneas de ferrocarril más importantes de España.

Tras estos acontecimientos no es extraño que los foros cívicos de la Cuenca Minera critiquen la falta de interés de las administraciones.

Desde Ecologistas en Acción, Juan Romero critica la "desidia, apatía y tolerancia de las administraciones con estos expoliadores, que van a imposibilitar poder usar el ferrocarril y sus puentes para otros fines, como el cultural o turístico". Romero ve ya "intereses ocultos en este tipo de actos, debido a la continuidad de los mismos y que estos hechos no tengan reprimenda" por lo que tanto Amigos del Tinto como la Asociación de Amigos del Ferrocarril han pedido una vez más "vigilancia" y que se apliquen multas y medidas para que no se pueda acceder a estos lugares con vehículos", ya que, denunció Juan Romero, "se han hecho ya hasta una carretera hasta Manantiales" por donde entran con total impunidad provistos de sierras y equipos electrógenos para proceder más rápidamente al desmantelamiento de la infraestructura férrea.