La Delegación de Salud de la Junta de Andalucía en Huelva señaló ayer en referencia a la polémica que afecta al Centro de Salud de Aracena por la denuncia de profesionales sanitarios ante la falta de medios para combatir las altas temperaturas que el golpe de calor que sufrió la enfermera la pasada semana, concretamente el lunes 6 de julio al final de la tarde, "no fue en esa fecha", tampoco propiciado por las altas temperaturas en el centro sino "por la temperatura ambiental", que incluso "no fue en horario de trabajo ni en la consulta de Urgencias" y que fue "algo puntual".

La enfermera implicada y afectada por el golpe de calor, Pepa Romero, explicó que en la Delegación Provincial de Salud están "mal informados por decirlo de forma suave" y advirtió que tiene "pruebas de todo lo sucedido y de igual forma en las áreas y gerencias competentes" apostilló.

Romero señaló que "así llevamos todo el verano" y que han "realizado todos los procesos necesarios antes de hacerlo público", con el único objetivo de solucionar el problema y trabajar en las mejores condiciones, o al menos en las "óptimas y mínimas exigidas" por el bien de los profesionales y de los pacientes.

Las denuncias de los profesionales sanitarios de Aracena al Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva están llegando desde el pasado 1 de julio "casi a diario y algunos días hasta con varias a la vez", según aseguran.

Sin embargo la situación sigue igual, aunque el martes un técnico de aire acondicionado estuvo revisando los aparatos de las consultas de Urgencias, que siguen sin funcionar y "cuyo arreglo sería más costoso que uno nuevo".