El alcalde de Cartaya, Juan M. Polo, desmintió ayer el vertido de lixiviados sin autorización por parte de la empresa encargada del servicio de basuras en la localidad. En una nota de prensa, el regidor se refirió al escrito que le remitió un grupo de trabajadores de Recolte, la empresa concesionaria del servicio de basura en Cartaya, y en el que alertaban de una serie de "incumplimientos" de carácter medioambiental.

Polo negó que se esté produciendo el vertido de lixiviados sin la necesaria autorización para ello, puesto que, "la empresa en cuestión cuenta con los debidos permisos".

A su vez, el resto de trabajadores de la empresa se desmarcó del escrito citado porque "no representa a la mayoría de los trabajadores" y envió otro al alcalde señalando que la acusación "falta a la verdad".