El desarrollo del último Pleno de la Mancomunidad Ribera de Huelva, en el que se aprobaron los presupuestos con la presencia de sólo cinco de los 12 alcaldes de los pueblos miembros, ha abierto una nueva polémica en la vida política provincial, sobre todo por haber trascendido que Manuel Guerra y Antonio Sosa, alcaldes de los dos pueblos que hicieron valer el mayor peso en votos de sus municipios (Aracena y Galaroza) perciben 50.000 de los 260.000 euros de las cuentas que aprobadas.

El secretario de Organización del PSOE de Huelva, Jesús Ferrera, quitó ayer hierro al asunto y recordó que los presupuestos de la Mancomunidad Ribera de Huelva vienen aprobándose desde el año 2011, mismo año en el que se aprobaron los sueldos sobre los que "no hay ninguna novedad al respecto".

"Parece que ha levantado cierto revuelo el tema de los sueldos, que se aprobaron en 2011, por tanto no estamos ante ninguna novedad", aseguró. Además, sobre el funcionamiento de las votaciones, Ferrera afirmó que "una de las cosas que se llevaron a cabo en la mancomunidad precisamente es que cuando un alcalde , que tiene el deber y la obligación de asistir a la mancomunidad, si por cualquier motivo dentro de su función como alcalde no puede asistir al pleno, puede delegar su voto".

No obstante, el secretario de Organización admitió que en este caso "ha habido más ausencias que en otros plenos, pues sí, pero no lo puedo catalogar como algo extraordinario".

"Yo sé que los compañeros socialistas que no acudieron a este pleno tenían reuniones para tratar temas importantes que afectaban a su municipio y delegaron su voto", explicó Jesús Ferrera, quien aseguró que precisamente se había producido un encuentro de su grupo para debatir las cuestiones del pleno y los alcaldes a los que no les resultaba posible ir delegaron su voto.

Sin embargo, el Partido Popular criticó que la mancomunidad "es un chiringuito cuyo único fin es compensar con dinero público a cargos políticos del PSOE".

Para los populares, es "escandaloso" que el PSOE haya aprobado un presupuesto para esta institución que contempla el pago de 50.000 euros en sueldos para los alcaldes de Aracena y Galaroza y subrayó que "el PSOE usa el dinero público para premiar a sus alcaldes y ha transformado esta mancomunidad en un chiringuito de cargos políticos muy bien remunerados".

El secretario general del PP de Huelva, Guillermo García Longoria, acusó al PSOE de "falta de sensibilidad y compromiso" con los tiempos que corren y calibró que sólo los sueldos constituyen el 20% del presupuesto de una mancomunidad que a su juicio "carece de actividad puesto que ya no gestiona apenas servicios", afirmó el popular.