Aunque aún hay tiempo (dos meses), lo cierto es que las playas onubenses aún distan bastante de presentar su mejor aspecto de cara a la temporada alta estival y presentan, según los casos, distintos problemas que van desde suciedad hasta carencia de infraestructuras, o el más complicado de solucionar tanto desde el punto de vista técnico como económico, como la falta de arena por la acción de los intensos temporales del invierno.

Los dimes y diretes en que están enfrascados en esta materia desde hace meses los dos grandes partidos (PSOE/PP), a través de las distintas administraciones que controlan: Gobierno central, autonómico y ayuntamientos (cada uno con sus competencias en la materia), poco contribuyen a la solución de un problema que puede afectar muy negativamente a uno de los pilares económicos de la provincia como es el turismo. Y más en estos tiempos en que las arcas de las administraciones están prácticamente vacías y, en los que por ese motivo. se hace aún más necesaria que nunca una mayor sensibilización para hacer frente a una situación que debería convertirse en Huelva casi en una cuestión de Estado.

Ni la crítica exacerbada mostrada por los socialistas a la hora de describir el estado de las playas, que han llegado a tachar de "tercermundista" para exigir al Ejecutivo central mayores inversiones, ni la técnica de mirar para otro lado asegurando que las playas están en "buen estado" por la que han optado los populares, contribuyen a solventar un problema para cuya solución ya se ha iniciado la cuenta atrás hasta el mes de julio.

Pero quienes mejor conocen el estado de las playas son, sin duda, sus usuarios y quienes viven directamente de ellas, los propietarios de los chiringuitos. En un repaso realizado este fin de semana por todo el litoral onubense por Huelva Información, prácticamente todas las personas consultadas a pie de playa han coincidido en destacar que el estado del litoral no es el mejor, estando para muchos incluso peor que otros años en esta misma fecha, aunque también se muestran confiados en que el final lleguen las soluciones para encarar el verano de la forma más digna y teniendo en cuenta las consecuencias de los fuertes temporales del pasado invierno y la falta de recursos económicos de las administraciones.

En definitiva, tanto usuarios como empresarios se han mostrado preocupados, a la vez que pacientes, comprensivos y, finalmente confiados, en que al final lleguen las soluciones para unos problemas que, de poniente a levante, son muy diversos y variados.

Después de acondicionar el Consistorio ayamontino las playas de Isla Canela y Punta del Moral de cara a la Semana Santa, los fuertes temporales que desde entonces se han sucedido han hecho que el mar escupa sobre la arena numerosos sedimentos fluviales como maderas, troncos, cañas y, en menor medida, todo tipo de basuras que, después de ser amontonadas, aún permanecían este fin de semana pendientes de retirar.

Así, Javier Martín, que viene de Badajoz todos los años a la playa de Isla Canela, a la que califica de "correcta", lamentó este hecho "motivado por los vendavales", al tiempo que se mostró confiado en que al final la playa "estará bien, al igual que otros años". "Es una playa a la que venimos asiduamente y siempre está correcta" puntualizó. En parecidos términos se mostró Carolina Bolaños, que vive desde hace 13 años en Ayamonte, quien afirmó que "en líneas generales está bien y pienso que es de las mejorcitas de Huelva". "Lo que pasa -prosiguió- es que las últimas mareas trajeron un montón de porquería, pero lo están limpiando y estoy convencida de que este verano estará en buenas condiciones, como siempre".

Un poco más crítica se mostró Laura Saldaña, de la cafetería Botalón, para quien "la playa aún no está preparada para recibir al turismo en verano porque aún no la están limpiando a fondo". Y es que según Saldaña "los montones de porquería están ahí desde hace dos semanas, lo cual no da buena imagen". Esta empresaria también opina que "deberían haber puesto ya todas las pasarelas de acceso a la playa". No obstante, se mostró confiada en que "todo esté en condiciones de cara al verano, ya que aunque sabemos que la situación está mal, que cuesta dinero, hay que hacerlo".

Por su parte María del Carmen Martín, del bar Los Barriles reconoció que "aunque durante el invierno ha estado un poco descuidada, el Ayuntamiento ha empezado a arreglarla hace dos semanas y esperamos que antes del verano esté todo controlado porque esta playa siempre ha estado muy limpia y cuidada, lo cual es imprescindible para nosotros".

La situación de las playas isleñas es bien distinta y parece que el Consistorio hace sus deberes. Al menos así se desprende de las opiniones de algunos de sus usuarios como es el caso de Eduardo Gamarra, que viene de Sevilla y que asegura que el estado de las playas es "muy bueno, por lo menos ahora, y el verano pasado también estuvo muy bien". En este sentido, Mari Carmen del Pozo, también se Sevilla, valora muy positivamente los servicios de la playa isleña de La Redondela. Y es que "todo es muy distinto al de otras playas andaluzas como las de Cádiz, donde al contrario que aquí, las duchas, los lavapiés o los chiringuitos no empiezan a funcionar hasta el mes de julio".

Por la parte de los empresarios, Pedro Mestre, propietario de uno de los chiringuitos de La Redondela, aún reconociendo que "las playas aún no están en óptimas condiciones por los vendavales, se están limpiando". De esta forma se mostró seguro de que para el verano "van a estar a punto porque hasta hoy mismo el Ayuntamiento ha estado limpiando, como habitualmente hace, ya que es fundamental para atraer al turismo". Lo que pasa, afirmó, es que "después de la Semana Santa han tenido que emplearse a fondo, después de cada temporal".

Los usuarios de la playa de La Antilla se han mostrado algo sorprendidos tras sus primeras visitas de este año. Y es que aquí el problema es bien distinto y pese a estar limpias, los temporales han retirado ingentes cantidades de arena, dejando al descubierto tubos de desagüe de pluviales y otros elementos arquitectónicos. Pero lo peor, coinciden casi todos en afirmar, es el lodo negro que ha aflorado en algunos tramos de playa, lo cual incomoda a los bañistas, sobre todo durante la bajamar.

Así, para Yolanda Valderas, que viene a la playa lepera desde los ocho años "La Antilla cada vez está peor, más descuidada y la limpieza es cada vez más cortita". Sobre todo critica la presencia de lodo y afirma que "antes, tras el invierno, traían arena, y desde hace unos años no se está haciendo casi nada".

Por su parte, el también sevillano Fernando Lagares, asiduo a esta playa, no oculta su "sorpresa" ya que según sus palabras "esperábamos que estuviera algo mejor y está descuidada". No obstante, cree que "aún no ha dado tiempo a acondicionarla después de los temporales, aunque otros años, en Semana Santa, su estado es algo mejor". Finalmente se muestra seguro de que "al final apretarán y para el verano estará bien".

Otros usuarios de la playa de La Antilla, sin dejar de destacar sus bondades, hacen referencia, como es el caso de la Sevillana María Rodríguez a que "el problema es que nos estamos quedando sin playa, y eso es achacable a la naturaleza". Finalmente, confió en que "en verano estará bien, como todos los años, ya que el Ayuntamiento no puede descuidar su principal fuente de ingresos".

Parecido problema sufren las playas de Cartaya, especialmente su tramo de Nuevo Portil abierto al océano, donde la desembocadura del Piedras sigue erosionando una playa que no se regenera desde que la arena procedente del último dragado fue depositada en 2010 sobre esta parte del litoral. En cuanto a las playas fluviales (la mayoría), el abrigo que supone la Flecha del Piedras hace que su estado de conservación sea mucho mejor, presentando en líneas generales un buen estado de limpieza y conservación. Tan sólo una salvedad: aún no han concluido los trabajos de reparación de algunas pasarelas de acceso a la playa que fueron destrozadas por los temporales y que según la primera fecha comprometida para ello tanto por el Ayuntamiento como por la Dirección General de Costas, debían haber estado listas para la Semana Santa.

En la Costa occidental, quizás la peor imagen la han dado este fin de semana las playas puntaumbrieñas situadas en el tramo comprendido entre la Matanegra y El Portil. Y es que ingentes cantidades de palos, cañas y otras basuras aún se acumulaban el sábado en sus orillas, haciendo prácticamente imposible el baño en algunos tramos.

Algo que reconoce Matías de la Horna, propietario del Chiringuito El Matías, quien aseguró que "ahora mismo las playas están sucias". Del mismo modo aseguró que el Consistorio "está en ello, aunque ha sido tanto el temporal y tanta la porquería que ha traído, que no da abasto". En este sentido afirmó que "ya hay bastantes kilómetros limpios", así como se mostró confiado, sobre todo tras la conversación que mantuvo la pasada semana con la concejala de Turismo que "en verano esto va a estar limpio ya que como mucho tardarán una semana en retirarlo todo". Y es que según concluyó "esto afecta muy negativamente a nuestros negocios y a nuestra imagen". Como anécdota, Matías de la Horma aseguró que "ha sido tal la cantidad de madera que ha traído la marea, que ha venido gente incluso a cargar sus coches para leña para las chimeneas".

Los empresarios consultados por este periódico critican que las administraciones pequen de falta de cintura. "Son rehenes del calendario", sentencia. Fijan la limpieza y acondicionamiento del litoral en los prolegómenos de la Semana Santa, olvidándose de retomar los trabajos hasta el próximo puente, con independencia de circunstancias como el buen tiempo que genera la llegada de usuarios, la presencia de temporales u otras necesidades de mantenimiento.

En este sentido, explican que este año el Domingo de Resurrección cayó el 31 de marzo, de forma que hasta el inicio de la temporada alta restan algo más de dos meses y medio, lo que requiere una actuación en profundidad en el litoral, sobre todo ahora que el buen tiempo se ha instalado como algo más que un oasis en medio de tanta lluvia.

En Mazagón, las máquinas ya trabajaban a pleno rendimiento retirando los restos de vegetación diseminados por la arena desde la zona del Vigía hasta el arroyo Julianea. En otras zonas como el Parador aun era necesario realizar una limpieza más en profundidad de la arena en las zonas más cercanas a las grandes dunas, si bien ya se han retirado los residuos sólidos que escupió el mar. En cuanto a las infraestructuras, las pasarelas mantienen un óptimo estado de conservación, así como contenedores y sus bolsas de basuras recién puestas, amén de señalizaciones y duchas.

La playa almonteña presenta un estado más deteriorado. Juan Gómez, presidente de la Asociación de Vecinos y Propietarios de Matalascañas, señaló que en la Comisión de Seguimiento los representantes de la corporación municipal les habían reconocido que "no han podido limpiar la arena debido a que la máquina municipal se encuentran estropeada y no disponen de liquidez para arreglarla". Gómez resalta que en dicha comisión se encuentran integradas las dos Asociaciones de Chiringuitos, la de Hoteleros, Comerciantes del Centro, la de Bares de Copas y "la indignación" es el denominador común. "Después de Semana Santa y durante la Feria de Abril de Sevilla el núcleo costero presentase una imagen deplorable, presentando una evidente carencia de servicios". Aun así, durante los fines de semana se abren los tres puestos de socorro en la Peña, El Flamero y Caño Guerrero en función del buen tiempo.

En cualquier caso, Gómez volvió a quejarse de que el Ayuntamiento no invierta en proporción a los recursos que genera Matalascañas. "Pagamos tributos mucho más altos que en el núcleo matriz, donde van a parar la mayor parte de las inversiones", sentenció el líder vecinal.

En Mazagón, José Antonio Mayo explica que en ejercicios anteriores, durante la Semana Mayor "se realizaba un lavado de cara a la línea de costa y no se realizaban nuevas actuaciones hasta la puesta en marcha del Plan de Playas, a primeros del mes de junio. Sin embargo, explica que estas tareas son imprescindibles en "unas fechas en las quienes nos visitan deciden formalizar sus reservas en los hoteles o alquilar para la temporada veraniega", de ahí que incida en la importancia de ofrecer una buena carta de presentación en los meses de abril y mayo.

En paralelo a las actuaciones en el litoral, el Ayuntamiento de Palos de la Frontera ultima la ejecución de la segunda fase de actuación de las obras y reforma de la Avenida Conquistadores, con la que se adecentarán 160 plazas de aparcamientos a las espaldas de la primera línea de costa.