Dedicó a los periodistas varias horas durante las que describió cómo durante más de dos años escondió los papelitos de su diario escrito en clave. Poseedor de una caligrafía exquisita, magnífico dibujante y agil narrador, Juan Miguel Fernández fue un hombre bueno reclutado a la fuerza para una guerra en la que se negó a disparar. La madrugada del pasado miércoles fallecía a los 92 años de edad. Lo que sigue son extractos de Diario de un soldado español.

R año 1938 O

3 26 de agosto

"A la edad de 18 años he sido movilizado por el Ejército de Franco para incorporarme a filas. Coincidiendo con el segundo aniversario de la invasión fascista de Nerva, he partido de mi hogar tomando el tren a las 7 de la mañana en la estación ferroviaria de Nerva con destino a Huelva. Veníamos expedicionados unos cuarenta reclutas nervenses nacidos en el primer trimestre del 1920".

3 28 de agosto

"Hoy domingo, por vez primera en mi vida he asistido a misa. Se verificó en el patio del Cuartel [de Algeciras]. Un cura con imagen mastodóntica la ofició".

3 21 de septiembre

"La mañana fue como las dos precedentes; tras el desayuno, al campo a continuar con las prácticas de tiro. Según mis convicciones, instruir para matar ya es un crimen".

3 15 de octubre

"Cambió mi vida para mí; esto no es comer fruta de las exuberantes huertas de la añorada Tarazona, ni pasear por su Avenida cortejando a las simpáticas y afables baturrillas. Esto es la guerra, propiamente dicho. Un informe cúmulo de calamidades, una fusión de terror, fatiga, dolor, sangre, muerte...".

3 4 de noviembre

"Esta madrugada pasé mucho frío en la avanzadilla, y gracias que lo palió algo la atención que puse en escuchar a los comisarios políticos republicanos que de noche nos hablan hasta por los codos. Por ellos algunas veces me entero de cosas que omite la radio y la prensa fascista. Según le oí decir a uno de ellos, Franco concertó con Hitler hacer los intensos bombardeos sobre Guernica. […] No concibo tanto cinismo de Franco, que cacarea y blasona de patriota y contrata a extranjeros para que asesinen a sus compatriotas".

3 13 de noviembre

"Día triste y trágico". […] "Entre los escombros de una casa derruida hallamos los cadáveres de dos soldados republicanos. Los legionarios, exentos de escrúpulos y ávidos de botín les registraron los bolsillos del uniforme y les extrajeron dinero, retratos, tabaco, etc.".

3 15 de noviembre

Al fin, esta madrugada pasada, a las 1.45 horas, pudimos descansar del suplicio de horas de marcha cargados como acémilas y sin apenas comer ni beber. Algunos soldados no han llegado. Han quedado atrás vencidos por la sed o la fatiga, o tal vez heridos o muertos. Al conde Amalio, de mi compañía, joven requeté voluntario, soldado raso, cegato y flojo, instruido y educado, le vi que quedó tendido en el suelo en una vaguada, más muerto que vivo de inanición, maldiciendo a sus mandos: 'No tenéis piedad de mí; me estáis matando', decía. Presumo que haya muerto allá".

3 11 de diciembre

"Con riesgo de castigo Alejandro y yo faltamos a misa y fuimos a lavar la ropa a un barranco. Primero la pasamos por agua hirviendo, que aunque aquí no dispongo de diccionario, creo que a esto se le llama colada. Emergieron a la superficie del líquido más de 200 piojos,. ¡Qué asco de tanta puñetera miseria!".

R año 1939 O

3 3 de febrero

"Esta mañana, próximo a Caudiel, dos moros salvajes violaron y dieron muerte a machetazos a un requeté de 18 años. Le acompañaba otro requeté que logró escapar ileso, pero captó la fisonomía de los asesinos. […] Formaron la Unidad hispano africana exceptuando a los españoles y, reconocidos los asesinos. Compuesto un piquete de ejecución por sus mismos compañeros moros, les fusilaron en presencia de los acusadores, la oficialidad y moros del Tabor".

3 22 de febrero

"A las 9 de la mañana, aviones fascistas irrumpen en la zona roja regándola de periódicos y octavillas que instan al enemigo a la rendición. A mediodía, un soldado de un batallón de infantería de mi división se ha evadido al campo republicano. Acción inútil y descabellada a mi juicio, hay cosas inexplicables en la vida".

3 10 de marzo

"Prosiguen las fugas de los rojos a nuestras posiciones. Esta mañana, cuando amagaba el sol, se presentaron desarmados y con pañuelos y pendones blancos grupos, escuadras, etc. […] "Es inminente el triunfo del fascismo. ¡Qué pena! No habrá quien nos libre de al menos 20 años de dictadura. Pero reitero, que por una parte me alegro de lo que ocurre, porque concluirá una cruenta guerra y porque veré pronto a mis seres queridos".

3 28 de marzo

"¡Al fin triunfó mi anhelo, mi ensueño, la unión de todos los españoles que tanto hemos sufrido! ¡Qué emoción tan intensa! ¡Qué día tan feliz, tan grande, tan hermoso! ¿Cómo empezar a describirlo si me lo impiden los nervios? He perdido la calma. Cuál grande y sublime es abrazarse a los que verdaderamente son nuestros hermanos y no nuestros enemigos. Son desgraciados como nosotros, que por azares de la vida nos hemos enfrentado".

3 24 de abril

"Hoy he estado de guardia en la cárcel de esta localidad [Liria] y he pasado ocho horas de sufrimiento viendo llegar y salir camiones cargados de presos conducidos por falangistas y guardias civiles. Sugiero que los que salen será para encerrarlos en otras cárceles o asesinarlos en los cementerios, que es donde suelen realizar las masacres estos hijos de Nefistófeles".

3 28 de junio

"Acabo de llegar del cine con Marcelino. Ambos, sin ser vistos, saltamos por una ventana cuando cenamos y por la misma ventana hemos entrado. [...] Vimos el reportaje Sevilla rescatada, cuyo principal protagonista de ese fatídico hecho histórico fue el sanguinario y traidor Queipo de Llano, alias el Carnicero de Andalucía, remoquete conseguido por sus infinitos crímenes. Además, vimos el filme El centauro de los cheyennes, protagonizado por Tom Keene".

3 23 de noviembre

"Hoy he presenciado un espectáculo patético y horroroso que jamás olvidaré. Estando de guardia en la cárcel [...] los guardias civiles sacaron de ella a unos 90 presos de ambos sexos maniatados de a dos y los subían a empujones y culatazos en lo alto de camiones de carga para ejecutarlos en el cementerio de esta localidad. Una mujer, cuando un guardia le dio un empujón hacia el camión, se revolvió y atada aún a su compañera como estaba, le dio al esbirro tan tremendo puntapiés en sus partes que gritó de dolor al par que se echaba las manos al sitio afectado. También trató de moderle, pero lo impidió un culatazo que le propinó otro esbirro. [...] "No he visto una mujer más valiente".

R año 1940 O

3 9 de enero

"Finalizo el Diario de mi servicio militar con la emoción y la alegría del día más feliz de mi vida. [...] "Al apearme del coche en mi pueblo natal, me vi rodeado de mis padres, hermanos y amigos. Todos me abrazaron y besaron con lágrimas de emoción y alegría, y ya en casa volví a recibir montones de besos de mis queridos padres".