Asociaciones del núcleo costero de Mazagón, agrupadas en la Plataforma Mazagón Verde-Puerta de Doñana, han mostrado su satisfacción por que la Unión Europea haya admitido y enviado a la Comisión de Petición su denuncia sobre el futuro parque eólico que se proyecta en el Dique Juan Carlos I de Huelva, del que piden su freno por su "impacto ambiental, sonoro y visual", después de que presentaran ante la institución europea un escrito "de oposición" a este proyecto.

El colectivo ya entregó otro escrito similar ante la Delegación del Gobierno de la Junta en Huelva, al que "ahora se ha añadido nueva documentación que avala ante Europa la petición de paralización de este proyecto".

Según el portavoz de la plataforma, Francisco Miranda, la comisión determinará "si es competente en la materia, y en caso afirmativo crearía una comisión a través de la que reclamaría más información para tomar decisiones, entre ellas, la paralización de este proyecto", algo que, según aseguró, "ya ha hecho en el Levante español con una instalación de menor impacto que ésta".

En este sentido, confió en que la documentación aportada a la UE "sirva para demostrar que este proyecto no cumple con la normativa vigentes", ya que la instalación "va a suponer un grave impacto al entorno natural de la zona, conformado por el Paraje Marismas del Odiel, las Lagunas de las Madres en Palos de la Frontera y Moguer, o la zona de Doñana próxima a Mazagón". Aunque se mostró "de acuerdo" con este tipo de energías, destacó que esta instalación "no cumple con el nuevo decreto del Ministerio de Industria, que prohíbe estos parques a las entradas de los puertos, como ocurre con este en el caso de los de Huelva y Palos ".

La plataforma vecinal, que se ha personado en todos los expedientes abiertos sobre este proyecto en las delegaciones de Medio Ambiente y Obras Públicas, Autoridad Portuaria y Ayuntamiento de Huelva, mantuvo ayer un encuentro con el portavoz del equipo de gobierno del PP, Francisco Moro, para mostrarle su "rechazo" a la iniciativa.