El concurso de fotografías de los Rehiletes de Aracena 2014, celebración ancestral que se celebra cada año en la noche del 7 de diciembre, previa a la Inmaculada Concepción, ha registrado una buena participación.

El salón de Plenos del Ayuntamiento de la localidad serrana acogió el acto de entrega de los dos jamones a las dos mejores fotos del concurso, organizado por el Consistorio aracenense, a través de la Concejalía de Festejos, Salud y Tradiciones, en colaboración con la empresa Somos Destino Rural. En este caso los dos ganadores han sido dos vecinos jóvenes de Aracena; José Andrés García Romero de la Osa y José Torres Barzábal.

En el certamen había una doble modalidad de participación: vía redes sociales con diferentes hahstag en Twitter e Instragram, que ha contado con unas cien impresiones y menciones, o mediante correo electrónico con el envío de casi 50 fotos a través de unos 25 participantes aproximadamente.

Las fotos ganadoras pasarán a formar parte del Archivo Municipal de Aracena con el posible uso del Ayuntamiento para publicaciones y anuncios de esta fiesta y tradición cebollera.

El concejal de Festejos, Eduardo Nevado, manifestó el deseo de realizar una exposición con todas las fotografías participantes en un futuro.

El concurso surgió pocos días antes de la celebración de los Rehiletes y a través de las redes sociales tuvo mucha difusión. Han participado muchos vecinos de Aracena, especialmente jóvenes y amantes de la fotografía, y otros foráneos que admiran cada año unas de las tradiciones más antiguas, singulares y queridas en Aracena.

El concejal Eduardo Nevado indicó que "no había en el Archivo Municipal fotos de esta tradición tan nuestra y el concurso surge con esa idea". El jurado del concurso ha estado compuesto por personas de la localidad que conocen muy bien el mundo de la fotografía. Las dos imágenes ganadoras muestran tanto el futuro de los rehiletes con los niños muy presentes, grandes protagonistas de la noche, y lo que es Aracena en una noche diferente a las demás, en la que las familias salen a la calle y recorren cada una de las muchas candelas de los barrios y rincones de la localidad.