La onubense Cinta Hermo presentará su nuevo disco, Reina de tus amores, el próximo día 29 de marzo en la sala Arte B del barrio madrileño de La Latina, a las 22:30 horas. Un trabajo en el que está acompañada a la guitarra flamenca por el maestro madrileño del nuevo flamenco Agustín Carbonell, El Bola.

La artista, que posteriormente presentará el disco en su tierra adoptiva, en Helsinki (Finlandia) el 27 de abril, no puede ocultar su emoción ante este nuevo trabajo cuya imagen de portada está tomada en Helsinki y la de contraportada, en la playa de El Portil, "las dos tierras de mi corazón".

"Mi álbum es precioso. Estoy totalmente enamorada de él. Estoy viviendo una gran aventura. Soy la autora de la música y la letra de todas las canciones, en las que respeto mucho lo tradicional y combino la fuerza del sentir flamenco gitano de dos polos importantes, como son la capital de España (ya que Agustín es madrileño), con la frescura de los jóvenes andaluces-choqueros Jesús y Víctor Carrasco, con los que he grabado cuatro temas de un total de 10, donde incluyo mis fandangos, tangos, soleá, rumba, sevillanas, tanguillos, bulería-saeta, y una aproximación a la alegría", comenta.

Entusiasmada por la calidad del disco, reconoce la importante aportación de Agustín Carbonell, "un guitarrista de élite que ha hecho tres giras con Paco de Lucía y acompañó a Enrique Morente durante 10 años, además de ser también excelente cantaor y compositor y haber trabajado con lo mejor del flamenco y otras músicas, como el proyecto con el saxofonista Jorge Pardo".

Esta nueva aportación discográfica está grabada en España y mezclada en Helsinkisiendo el Master de Jan Erik Kongshaug, del Rambow Studio, en Oslo.

Cuando pedimos a Cinta que nos desgrane este nuevo trabajo despierta la curiosidad con un "bienvenidos a un viaje sorprendente". Luego relata los sucesivos cortes del álbum.

"A esta aventura discográfica la titulo Reina de tus amores, nombre de la bulería que abre el álbum. Mi marido, Markku Ounaskari, batería finlandés y Premio Nacional de Jazz 2010, me acompaña a golpe de saeta en la letra de una de mis bulerías, naciendo de esta mágica forma, la unión de dos palos flamencos que me gustan tanto, mi bulería por saeta: 'Quisiera ser pequeña para que tú me adores, yo quiero ser la reina de tus amores'... son los primeros versos con los que mi voz se asoma a este viaje flamenco tan personal", relata.

En segundo lugar, la artista cuenta que sus tangos caminan con el impulso poderoso de Agustín Carbonell, "El Bola": "A los escasos ocho minutos de música, en el tercer corte, llegamos a lo que considero el padre del flamenco, el fandango. Mi fandango es choquero, no hay dudas de su exacta procedencia, es un canto a mi tierra y a la pureza de la niñez, dedicado especialmente a mi hijo. Son mis amigos onubenses Jesús, Victor e Israel Carrasco, los que me han acompañado en este maravilloso encuentro".

"Al lado del padre va, por supuesto, la madre, mi soleá, preciosa... Solo espero que la escuchéis. En quinta posición mi rumba, Antes que nada, vibrante y bonita, donde me he atrevido a hacer un pequeño solo de guitarra. Reconozco que las lágrimas se me caían cuando escuché por primera vez el master", comenta.

Y tras ella, Nazareno, sus sevillanas del caballo... El corte 7 es lo que Cinta denomina una aproximación a la alegría, Pececillo de luna, que interpreta sola a voz y guitarra, en un tono íntimo, momento del disco en el que ya su alma va desnuda. Continúa con El verde de los mares, (fandangos de Huelva) y Andalucía por sevillanas, cerrando el disco con un milagro por tanguillos, Hada Maga, una puerta abierta a la luz, a la esperanza... Y es que, tal y como indica, "todo el poder está en nuestro interior y debemos buscar en esa fuente para sacar las maravillosas perlas del silencio de nuestro corazón".

Esta es la primera autoproducción discográfica a la que se enfrenta la artista y, según confiesa, se siente libre y feliz. La cantautora onubense, que vive a caballo entre Andalucía y Finlandia, presenta en su nuevo trabajo discográfico una interesante muestra artística de su amplia y enriquecedora carrera.

Ha actuado en una veintena de países, desde Escandinavia a Estados Unidos, la India, Turquía, Alemania, Polonia, Francia o España y ha grabado ochio discos con su grupo étnico Piirpauke. El corazón de esta mujer, su voz, su guitarra y sus poéticas letras, recogen lo mejor de esas experiencias multiculturales, para pasarlo por el tamiz de su sentir andaluz y ofrecernos una creación de belleza minimalista y única, su alma flamenca.

Tras la presentación del disco en Madrid, Cinta Hermo pasará unos días de vacaciones en la provincia onubense, recuperando energías para la cita de finales de abril en Stoa, Helsinki, aunque bien pudiera ser que tuviéramos la fortuna de escucharla en algún concierto que se organice en Huelva.