Desde ayer, por decisión de la Gerencia del Servicio Andaluz del Salud (SAS), las farmacias están obligadas cuando se prescriba una receta por principio activo a dispensar el medicamento genérico más barato. Tal y como advirtió la patronal de las farmacias onubenses (Aprofao) y el Colegio de Farmacéuticos, ya ayer hubo desabastecimiento de medicamentos, que según el presidente del Colegio de Farmacéuticos, Francisco Peinado, fueron "puntuales" y se solventaron con la dispensación de otro con la misma composición pero de precio inmediato superior.

Peinado señaló que "se preveía" que pudiera haber desabastecimiento y "se le comunicó" a la Delegación Provincial de Salud, acordándose que ante la falta de un medicamento se podía aplicar este mecanismo: suplirlo con otro, para que el paciente no se vea perjudicado .

Peinado apuntó que la normativa asegura a los farmacéuticos el pago del genérico más barato y si se acredita el desabastecimiento la Administración pagaría el precio del inmediato superior. María Teresa Paus, que regenta una farmacia, indicó que para ello "hay que justificar diariamente con el albarán de entrega la falta del medicamento". Paus subrayó que la prioridad para el farmacéutico es "atender las necesidades del paciente".

El presidente del Colegio comentó que se encuentran en "una situación difícil" ya que el SAS ha denunciado el convenio de prescripción farmacéutica. Éste se ha prorrogado hasta el 10 de julio "y a partir de ahí es una incógnita".