Huelva

La noche más iluminada del año

  • Vecinos y turistas de Aracena disfrutan de la tradicional quema de los rehiletes en la noche previa a la Pural incordio La lluvia deslució la noche pero no impidió que se encendieran varias candelas en el municipio serrano.

La Sierra se ha inundado durante el mayor puente del año de muchas actividades y tradiciones, aunque al igual que el año pasado, la lluvia quiso hacer acto de presencia y deslució en parte una de las grandes noches que posee la localidad serrana de Aracena.

La noche de rehiletes aracenense, avelorios o ciriales en otros lugares, sirve para rememorar tradiciones pasadas y secundadas con fervor desde siempre sin llegar a perder su esencia en el presente. Muchos visitantes en la comarca cogieron esta noche de víspera de la Pura en Aracena como bálsamo para no irse de vacío de la Sierra sin ver fiestas tan particulares como los rehiletes.

En torno a las candelas y como preludio del día de la Inmaculada Concepción, la jornada terminó con una de las tradiciones más queridas entre los cebolleros, vecinos de Aracena, por perdurar tanto en el tiempo pese al paso de los años.

A diferencia de otros años, el número de candelas ha sido más reducido debido a la intensa lluvia caída el pasado martes sobre la comarca, y en general, todo el puente festivo. De hecho, la sensación a lo largo del día era que difícilmente podrían encenderse. Pero el agua quiso hacer una parada en el camino desde las siete de la tarde hasta las diez de la noche. Un corto espacio de tiempo en el que al menos los jóvenes, mayores y turistas disfrutaron del calor de la noche bajo una tradición ancestral, ya que a las diez en punto de nuevo la lluvia acompañada de tormenta cumplía el pronóstico acertado de la agencia estatal de meteorología con alerta amarilla por precipitaciones sobre Aracena. En especial, hubo tres puntos destacados en sendos barrios antiguos, una en la plaza Alta, otra en Santo Domingo y una tercera en la calle Alegre, junto a la Plaza de Toros. Además, una candela fue encendida en la ladera del Castillo, justo en el conocido bocao por vecinos de Santo Domingo. La candela de este barrio fue la más grande y con mayor presencia de público en un principio. En este barrio no se pudo celebrar el tostón solidario debido al temporal. La visita desde una candela a otra es un momento mágico en la noche más iluminada de Aracena.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios