Reza un eslogan del Ministerio de Defensa que "estar en forma es nuestro mejor arma". En base a esta sentencia, nuestros militares demostraron que tienen sobradas cualidades físicas para ejercer el desempeño de su labor. Esta afirmación fue refrendada a lo largo de la Carrera de las Tres leguas de las Marismas, que organizó el Cuartel General de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra en Sevilla y que pulsó el estado de forma del personal militar.

Aunque la belleza del paisaje y los encantos del entorno invitaban a desarrollar una carrera tranquila y sosegada, el espíritu competitivo de los militares y la responsabilidad de responder al objetivo de la campaña se demostraron más fuerte que los deseos. Sólo así se explica el infernal ritmo de carrera que imprimieron los cerca de 200 militares para cubrir los 17,2 kilómetros que los separaba de la línea de meta.

La salida partió desde la Raya Real a la altura de la carretera Pozo Maquina, lugar donde los participantes se adentraron, campo a través, hasta alcanzar la Casa Hermandad de Sevilla en la aldea de El Rocío. A lo largo del itinerario los militares pudieron abastecerse de bebidas y alimentos en dos puestos de repostaje: uno frente al Palacio del Rey y otro junto al Puente del Ajolí. A pesar de que una carrera de esta índole que se desarrolla a lo largo de un camino de arena implica un fuerte desgaste físico, más aun si se persiste en el intento de mantener un ritmo continuado que puede llegar a castigar severamente los músculos de las piernas, lo cierto es que el Cabo Tomás Paduana demostró sus innatas capacidades físicas, logrando rebasar la línea de meta en tan sólo 1 hora y 5 minutos. Sacando así más de un minuto a su más directo perseguidor y rebajando la media de sus compañeros en más de 15 minutos. La razón la encontraban sus compañeros: "en su vida civil es un auténtico prodigio físico en atletismo, corre maratones y todo", apostillaban.

Por su parte, igual de meritoria fue el tiempo del Sargento Isabel Casado, la mejor fémina que marcó 1 hora y 24 minutos, mientras que el premio al mejor batallón iría a parar al Regimiento de Guerra Electrónica.

Tras el éxito de la prueba el Capitán del Cuartel General de la Fuerza Terrestre de Sevilla, Antonio Ruiz, avanzó la voluntad de abrir la prueba el año que viene a la sociedad para que, al igual que se realiza en otras campañas que tienen lugar en la capital hispalense, la ciudadanía pueda compartir este tipo de actividades a caballo entre el deporte y el ámbito turístico. Precisamente el militar no quiso pasar la oportunidad de agradecer a la Paraje Natural de Doñana, el cuerpo de la Benemérita y el Ayuntamiento de Almonte la colaboración prestada.

En la prueba han participado más de 200 militares integrantes de las unidades: Cuartal General de la fuerza Terrestre del Ejército de Tierra, Segunda Subinspección General del Ejército de Tierra, Fuerza Logística Terrestre nº 1, Régimen de Guerra Electrónica nº32, Agrupación de Apoyo Logístico nº 21, Regimiento de Artillería Antiaérea nº74, Regimiento de Trasmisiones nº 22, Batallón de Helicópteros de Maniobra nº IV, Batallón de intervención de Emergencia II y Unidad de Trasmisiones del Mando de Artillería Antiaérea, ubicadas en la provincia de Sevilla.