El paraíso de cualquier roedor y, por supuesto, de todas aquellas personas que se relamen y sienten cierta debilidad por el queso. La plaza de la Gruta de las Maravillas de Aracena ha sido en escenario del VIII Mercado del Queso. Una quincena de empresas queseras de toda España se han dado cita en el municipio serrano de modo que los curiosos que han transitado por el lugar han tenido la oportunidad de degustar quesos de toda la provincia onubense, de la región andaluza y de otras comunidades españolas. Aracenenses y numerosos visitantes han podido probar, oler y observar la rica variedad quesera que existe a nivel nacional. El contraste de olores de diferentes quesos resultaba a veces gratificante para los amantes de este producto.

La forma escogida para probar los quesos antes de decidir su posible compra, al igual que en ediciones anteriores, ha sido mediante la compra de tickets para degustar varios tipos de quesos. Por otro lado, como en años anteriores, se ha habilitado un chiringuito de los miembros de la comunidad religiosa de las Hermanas Carmelitas de Santa Catalina en Aracena a beneficio siempre de proyectos solidarios y justificados.

Del total de empresas participantes han tenido siempre preferencia las procedentes de la provincia de Huelva para promocionar los pueblos onubenses y sus tradiciones. De hecho, había varias de la localidad anfitriona y algunas también de otros puntos de la provincia de Huelva, como la Cuenca Minera.

Representantes de las diferentes empresas queseras presentes han coincidido en que "la plaza de la Gruta se ha quedado pequeña" y proponen el traslado al recinto ferial con el fin de disponer de mayor espacio de exposición y para el público. Todo apunta a que éste será el último año que se haga este mercado en la plaza de la Gruta de las Maravillas ya que para la próxima edición Aracena dispondrá ya del nuevo pabellón ferial en el recinto ferial de la Avenida Reina de los Ángeles. La consolidación del mercado quesero invita ineludiblemente a este cambio de ubicación. Y es que de las quince empresas actuales se pretende pasar a la veintena, pero sin miras a la cantidad de empresas, sino a la calidad de los productos queseros ofrecidos en el mercado.

Los amantes del queso han podido probar quesos de tetilla de Galicia, las tartas de queso de Aracena, los quesos picantes del Norte o Cabrales, algunos manchegos, extremeños, cántabros y, por supuesto, una rica variedad de productos andaluces.

No sólo eso, algunos quesos de los presentes en los stands de este mercado se están vendiendo en mercados tan lejanos como EEUU, donde ha calado sorprendentemente las tortas de cabra de Aracena, y en los países más importantes de la Unión Europea.

El ritmo de afluencia y compra en esta octava edición ha disipado los temores que tenían algunas de las empresas participantes con motivo de la crisis actual que atraviesa el país. Y es que aquellos que consideran el queso un manjar no han podido resistirse a tener en casa alguno o varios de los productos presentados en el mercado aracenense.

Un año más, uno de los aspectos más curiosos del mercado ha sido la participación de muchas empresas familiares en torno a la creación del queso artesano. En este caso, la transmisión de conocimiento de unas generaciones a otras resulta determinante.