La retirada de vehículos del Depósito Municipal por abandono o infracción se encarece el año próximo un 4,9%, superando un cargo de 60 euros para los turismos. El incremento aprobado por el Ayuntamiento para revisar este servicio forma parte de las subidas fiscales que se aplican a todas las tasas y precios públicos -así como al Impuesto sobre Actividades Económicas- con el referente común del IPC de agosto. La crisis ha duplicado el porcentaje de actualización de tasas que venía aplicando anualmente la Administración local (y asimismo la Diputación), de modo que si el servicio de grúa subió en 2008 poco más de un euro, para el año que viene la retirada de vehículos cuesta 3 euros más.

La llamada Tasa de Retirada y Recogida de Vehículos en la Vía Pública fija en las ordenanzas de 2009 un pago de 3,76 euros para la retirada de bicicletas y ciclos; y 20,11 euros si se trata de ciclomotores, motocicletas y motocarros. Se cobrará 60,3 euros no sólo a los propietarios de turismos, sino igualmente a camionetas y vehículos que tengan una tara inferior a 1.400 kilos. Para retirar los vehículos que rebasen este peso sin sobrepasar los 2.000 kilos se tendrán que abonar 101,8 euros por hora o fracción, tarifa que se eleva a 153,48 euros si se excede esa tara.

Estos importes se suplementarán con cuotas correspondientes al depósito y guarda de los vehículos, en el caso de que transcurran 48 horas desde la recogida del mismo sin haber sido recogidos por sus titulares en el depósito de la segunda transversal de Francisco Montenegro. En ese caso, cada día de abandono del automóvil costará a su propietario 6,9 euros en el caso de los turismos y análogos; 1,12 euros para las bicicletas; 2,95 para los ciclomotores y motocicletas; y 9,8 euros al día por los vehículos con tara superior a 1.400 euros.

Más de 3.000 vehículos (lo que supone un 5% del parque automóvilístico de la capital) pasan anualmente por el depósito, según los partes policiales que arrojan una llamativa proporción de casos de inmovilización en controles de alcoholemia y derivados (1.291 el año pasado).

El servicio de grúa aporta a las arcas municipales en torno a 200.000 euros en cada ejercicio, la décima parte de lo que viene ingresando el Consistorio onubense por procedimientos sancionadores relacionados con la gestión del tráfico, la normativa medioambiental, infraestructuras y los beneficios de liquidación de la Zona ORA (la concesionaria Dornier aporta anualmente al Ayuntamiento un canon de 180.303 euros).

La Unidad de Vehículos Abandonados de la Policía Local destruyó el año pasado en el depósito más de 300 automóviles considerados "residuos" según la normativa, al estar estacionados en la vía pública por periodo superior a un mes, y registrando graves desperfectos que impiden su movimiento y/o careciendo de placas de matrículas. Tras la comprobación de los agentes, se requiere al titular del vehículo que proceda a su retirada de la vía pública. En caso contrario, el automóvil pasa al depósito municipal, donde permanece un plazo de dos meses hasta su destrucción.

De los vehículos que se destruyeron el año pasado, la mayoría habían sido abandonados por sus propietarios. El resto de las destrucciones procedía de vehículos que figuraban en el depósito por inmovilizaciones, recuperación por robos o retirada de la grúa.

Según las estadísticas policiales, de los 625 vehículos que se abandonaron en 2007, un total de 106 fueron retirados por su titular.

El servicio de grúa está operativo las 24 horas, aunque el número de grúas que funcionan en la ciudad varía de acuerdo con el turno y el día de la semana. De lunes a viernes, por la mañana están operativas cinco grúas, por la tarde tres y una por la noche. Los domingos y festivos se reduce a una grúa por turno. El trabajo se organiza en cuatro zonas de espera: Pablo Rada, El Punto, La Merced y el Depósito Municipal de Vehículos (junto a Francisco Montenegro).