Gran día el vivido ayer domingo en Aracena. Nuestro Padre Jesús Nazareno de Aracena, la imagen de Cristo más querida y con mayor devoción en la localidad, salía ayer mediodía en procesión por primera vez tras su reciente y exitosa restauración.

Una procesión humilde, sencilla y elegante donde llevaron al Señor de Aracena en andas gracias a algunos miembros de la Junta de Gobierno, muchos costaleros, devotos, y cofrades. Y como ocurre en esta hermandad desde hace bastantes años, y en general en el ámbito cofrade de Aracena, las mujeres volvieron a portar en andas a Nuestro Padre Jesús, sin ser ya noticia. En este caso lo hicieron desde Santa Catalina hasta la Casa Hermandad de Padre Jesús.

El momento más esperado, la salida en andas de la imagen en andas, tuvo lugar con puntualidad pasadas las doce del mediodía, ya que dentro del templo el Señor recorrió y visitó a cada una de las imágenes y hermandades allí presentes: la Borriquita, la Reina de los Ángeles, la Divina Pastora, la Soledad y el Cautivo. Tras los debidos rezos y con una iglesia del Carmen llena de público la imagen salía a la calle, donde se aglomeraban también muchas personas. En el acompañamiento musical estuvo una vez más con Nuestro Padre Jesús, la Banda de Cornetas y Tambores de Aracena, que camina cada Madrugada de Viernes Santo tras el paso del Cristo aracenense.

El recorrido fue corto, intenso y emotivo. Recorrió algunas calles del centro en dirección a la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, donde Nuestro Padre Jesús salía en una fría y lluviosa mañana de abril, hace ya seis meses, hacia los talleres sevillanos de Pedro Manzano.

La imagen regresó de Sevilla directamente a la iglesia del Carmen, donde el sábado tuvo lugar un concurrido devoto Besapiés y, a su vez, la curiosidad, ganas y deseo por ver el trabajo realizado con la imagen. Los comentarios han sido muy positivos y el trabajo, apreciable tanto en la iglesia como en la calle, rozando la perfección. Más allá del ámbito cofrade la hermandad ha quedado muy satisfecha con el trabajo e incluso desde hace pocos días, la imagen de María Santísima de la Amargura, junto al Señor los dos principales titulares de la corporación nazarena, está ahora en los talleres del citado Pedro Manzano, donde trabajan a día de hoy con las principales imágenes sacras en Sevilla y otras grandes ciudades cofrades.

El paso en andas fue dirigido por el equipo de capataces de la hermandad y bajo su capataz general, Jesús Antonio Miranda Carrión. El cortejo iba encabezado por la Cruz de Guía que sale en Semana Santa, junto al estandarte de la hermandad, algunas varas con miembros de la Junta de Gobierno y la presidencia con Hermano Mayor, el cura párroco Longinos Abengózar Muñoz, y el alcalde, Manuel Guerra.

El cuanto a los cultos, ambos han sido oficiados por Longinos Abengózar, tanto el sábado en acción de gracias por el regreso de la imagen tras su restauración, como ayer con la Función Solemne en conmemoración del 75º de la llegada y bendición de la imagen, realizada por el imaginero José Ribera. Precisamente dicha bendición, hace 75 años, tuvo lugar en la Iglesia de El Carmen, y de ahí el recuerdo tan simbólico con los actos celebrados este fin de semana en dicho templo, ya que la sede canónica de la Hermandad es la Parroquia de la Asunción, en la Plaza Alta.