La sala de exposiciones del Teatro Sierra de Aracena acoge estos días una muestra diferente, especial, singular, única, que no deja indiferente a nadie. La exposición Seres del agua, del artista aracenense Emilio Rodríguez García, reúne un importante número de esculturas de forja, de importante tamaño en la mayoría de casos, de esos animales y seres que nos rodean en nuestro entorno acuático.

Obras de forja, en las que lo minucioso, los detalles, la precisión, todo ajustado al milímetro son características de las mismas. La exposición se inauguró dentro de un marco no previsto en un principio, ya que coincidió con el inició de las XXXI Jornadas del Patrimonio de la comarca de la Sierra en Aracena. Este evento ya estaba previsto en el programa de primavera del teatro serrano, pero tanto las jornadas como la exposición se han favorecido de ambas coincidencias en la fecha. De hecho las siete exposiciones de las jornadas, entre ellas ésta, han contado con una media de algo más de doscientas visitas diarias en los cuatro días de las jornadas.

Aún así la muestra estará abierta casi todo el mes de abril, concretamente hasta el próximo domingo 24 de abril, pudiéndose visitar en horario de tarde, de 19:30 a 21:30 y todos los días, a excepción de lunes y martes.

La inauguración contó con la presencia de amigos y familiares del artista, Emilio Rodríguez, y vecinos y curiosos, además de miembros de la corporación municipal de Aracena, entre otros del concejal de Cultura y Festejos, Eduardo Nevado, y del alcalde, Manuel Guerra a la cabeza.

Toda la sala del Teatro Sierra de Aracena está rodeada de figuras. Casi todas aparecen dentro de un marco de madera para poder verlas de cerca, incluso con relieve el interior o esqueleto de seres del agua muy variados.

La forja es un trabajo artesano difícil y poco llevado a cabo en estos tiempos. Además es complicado conseguir tantas piezas para luego darles la forma exacta. En el caso de Emilio Rodríguez, él es herrero de profesión y vocación, realizando además las obras con las técnicas tradiciones del oficio.

Son una treintena de piezas, fruto del trabajo callado con la fragua, el martillo, el yunque sumado a paciencia y originalidad del artista. Todo ello para sacar auténticas obras de arte de un trozo de hierro en bruto. La acogida de la muestra en estos primeros días está siendo muy buena, las obras de forja artesanal están gustando, y mucho, entre los visitantes, a los que sorprende gratamente.

La entrada es gratuita. La muestra está abierta hasta el 24 de abril, en horario de tarde, salvo lunes y martes.