El deporte de la petanca en la Sierra lleva varios años de gran acogida y auge, en especial entre las personas mayores y en particular en el ámbito masculino.

La práctica de esta peculiar modalidad ha sacado a muchos mayores en la comarca serrana de su hábito diario y, en algunos casos, de una aburrida rutina fruto de la jubilación y falta de atractivas alternativas.

De hecho, la petanca llegó a la Sierra hace varios años de forma aislada entre pequeños grupos de población, predominando los mayores, y en los que ya había incluso algún que otro joven. Normalmente, se jugaba en recintos feriales o en cualquier zona de terreno donde fuera posible su práctica.

En la actualidad la petanca se ha expandido de tal forma que son pocos los pueblos que no tienen alguna pista de petanca, la mayoría de ellas, en las instalaciones deportivas de los municipios e incluso, en algunos casos, en pleno centro del pueblo.

Esta demanda a la petanca ha ido creando el estímulo de organizar diferentes campeonatos, torneos y encuentros para la disputa de diferentes partidas. Una de las más destacadas es el campeonato que cada año organiza el Servicio de Deportes Agrupados de la Sierra, en el que participan muchas parejas de diferentes localidades y cuya final siempre se hace en algún lugar variopinto. Una de las más recientes, el pasado año 2011, tuvo lugar en la plaza de toros de Zufre donde el ruedo se convirtió por unas horas en un sitio ideal para acoger momentáneamente varias pistas de petanca. Muchas de las localidades serranas aprovechan la época veraniega para organizar su propio torneo en clave más local.

A través del servicio de deportes; en colaboración con los patronatos municipales de deportes, ayuntamientos y la colaboración de algunas personas, se hacen encuentros de petanca donde se invitan a parejas de los pueblos de la Sierra.

La última ha tenido lugar en Aracena, en concreto, en la zona de aparcamientos junto al recinto ferial de la avenida Reina de los Ángeles, que durante las fiestas mayores se usa como zona joven y lugar para las atracciones.

Recientemente, durante una mañana de domingo este espacio ha tenido una vida diferente. Allí se podían ver a la vez varias partidas de petanca, en torno a diez, gracias a la participación de unas cincuenta personas. Algunas de ellas eran mujeres que juegan bastante bien a la petanca, según reconocen muchos hombres. Lo de menos era el resultado final porque lo más importante era jugar a la petanca, pasar un buen rato y disfrutar de la mañana practicando deporte. Además, tras finalizar la competición tuvo lugar una jornada de convivencia en familia, en la que degustaron comida y bebieron entre amigos.